Tegucigalpa – El Foro Social de la Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH) ha arrojado luz sobre una preocupante realidad en el presupuesto de la Administración Central para 2024. Según el informe de Reflexiones Preliminares al Presupuesto General de la República del 2024, el 22 % de este presupuesto se destina al pago del servicio de la deuda, una cifra alarmante que pone de manifiesto la carga financiera que enfrenta el país.
El presupuesto total para el ejercicio fiscal 2024 asciende a 406,580 millones de lempiras, lo que representa un aumento del 3.6 % en comparación con el presupuesto aprobado para 2023. Este aumento se traduce en un incremento absoluto de 14,060 millones de lempiras, una cifra considerable.
En detalle, el Presupuesto de la Administración Central para 2024 se espera que alcance los 248,218 millones de lempiras, lo que refleja un aumento de aproximadamente el 5.8 % en comparación con el año anterior.
En cambio, el Presupuesto de la Administración Descentralizada para el mismo período es de alrededor de 158,362 millones de lempiras, lo que representa un modesto crecimiento del 0.2 % en comparación con 2023, equivalente a un aumento de 383 millones de lempiras.
Sin embargo, lo más preocupante es que el gasto principal de la Administración Central en 2024 se destina al pago del servicio de la deuda pública, ascendiendo a una cifra alarmante de 55,635 millones de lempiras.
Esta cantidad representa un asombroso 22 % del presupuesto de la Administración Central, una proporción que plantea interrogantes sobre la capacidad del país para hacer frente a sus obligaciones financieras.
El informe del FOSDEH también destaca que la asignación presupuestaria para el servicio de la deuda en la Administración Central experimentará un aumento significativo de 5,865 millones en 2024, lo que representa un incremento del 12 % en comparación con lo aprobado en 2023.
Este aumento en el servicio de la deuda es motivo de preocupación, ya que limita la capacidad del gobierno para invertir en áreas críticas como la educación, la salud y el desarrollo económico.
En resumen, el informe del FOSDEH revela una realidad fiscal alarmante en Honduras, con una parte significativa del presupuesto nacional destinada al pago de la deuda.
Esto plantea desafíos significativos para el país en términos de su capacidad para financiar programas y proyectos que beneficien a su población y promuevan el desarrollo sostenible.