Nueva York. – Luego de más de un año de permanecer en silencio, el exdiputado hondureño, Juan Antonio “Tony” Hernández durante la lectura de su sentencia tuvo permitido dirigirse al juez Kevin Castel a quien le dijo que se sentía traicionado por los Estados Unidos, país que considera violó sus derechos contenidos en la sexta enmienda de la constitución del país norteamericano.
El excongresista, “Tony” Hernández, comenzó su intervención preguntándole al juez si había recibido dos cartas que él envió hace una semana y media a lo cual el togado de la corte neoyorquina respondió que solo tenía una.
Tras la respuesta de Castel, Tony Hernández manifestó que no estaba satisfecho con el trabajo realizado por su apoderado legal, Peter Brill, con quien solamente asevera tuvo seis llamadas por teléfono, siendo la última el día previo a la lectura de su sentencia.
Para el exlegislador hondureño, el gobierno estadounidense presionó para que su condena fuera rápida, además expuso que se sentía traicionado y engañado por el país del norte que violó sus derechos.
Asimismo, habló sobre su solicitud de cambiar de abogado, a la vez que lamentó que la oficina del juez dejara que las cartas de sus familiares se filtraran en las redes sociales, apuntando que su apoderado legal le prometió que en 15 días hablarían sobre más instancias respecto al caso, pero indicó que se enteró que su sentencia sería el martes 30 de marzo a través de un medio de comunicación.
El juez Castel respondió a las declaraciones de Hernández exponiendo que no encontró nada que refleje la violación de sus derechos y agregó que el hecho de que tardaran en leer su sentencia un año y cinco meses después del veredicto nunca había pasado.
La dura condena a Hernández dijo el juez servirá como una lección a las personas que se dedican a las actividades ilícitas por las que el ex diputado hondureño fue hallado culpable en 2019.
