Tegucigalpa – Dirigentes del transporte urbano han hecho pública una preocupante denuncia este lunes, señalando que el gobierno les adeuda siete meses de subsidio a la tarifa.
Wilmer Cálix, representante del sector, ha revelado que el monto total adeudado asciende a 160 millones de lempiras, afectando a transportistas de Tegucigalpa, San Pedro Sula, La Ceiba y Choluteca.
La situación ha generado profunda frustración entre los transportistas, quienes confiaban en que el Congreso Nacional aprobara un decreto para hacer efectivo el pago y solventar la deuda acumulada durante siete meses.
Lamentablemente, la falta de sesiones en la Cámara Legislativa ha retrasado la solución del problema, generando un perjuicio tanto para los transportistas como para la población que depende del transporte público.
El dirigente, Wilmer Cálix, también ha destacado otros desafíos que aquejan al sector del transporte urbano, entre ellos el pago de extorsiones.
En algunas rutas, los altos costos de operación dificultan la viabilidad del servicio, poniendo en riesgo la continuidad del transporte.
Además, ha mencionado la aparición de nuevos grupos criminales que exigen el pago de extorsiones, lo cual agrava la situación y aumenta la presión sobre los transportistas.
A pesar de estas dificultades, los transportistas se ven obligados a mantener la operatividad para poder cumplir con las deudas adquiridas con los bancos.
Sin embargo, es evidente la necesidad de tomar medidas concretas para garantizar el pago de lo adeudado y brindar estabilidad al sector.
En este contexto, los dirigentes gremiales hacen un llamado urgente a los diputados del Congreso Nacional para que tomen conciencia de la situación y aprueben el decreto necesario, permitiendo así que se haga efectivo el pago de los meses adeudados.
La solución de este problema no solo beneficiaría a los transportistas, sino que también garantizaría un servicio de transporte público adecuado y confiable para la población en general.