Guatemala. – Un ejemplo: en San Pedro la Laguna, a poco más de 440 kilómetros de Tuxtla Gutiérrez, en Chiapas, vive una comunidad guatemalteca que decidió regresar a sus orígenes.
Para ello, esta comunidad ha decidido cambiar las bolsas de plástico por canastas de palma, servilletas de tela o envolturas con hoja de plátano.
Esta medida, adoptada legalmente en 2016, además prohíbe y multa el uso de popotes y bolsas de plástico con el objetivo de preservar el Lago Atitlán, que se había convertido en un vertedero de basura.
Para ello, simplemente la comunidad ha dejado de utilizar plástico en su vida diaria. Aquí, gracias a que los popotes, así como las bolsas de plástico están prohibidas, utilizan hojas de plátano, canastas o servilletas tejidas.
“En menos de un año, hemos reducido el 80 por ciento del consumo de plástico”, dijo a Al Jazeera, Mauricio Méndez, alcalde de San Pedro la Laguna.