Llamado “EveR 6”, el robot de 1,80 metros de altura guió a más de 60 músicos de la Orquesta Nacional de Corea que tocaban instrumentos tradicionales coreanos.
Por Clarín
El robot guió con éxito las composiciones, tanto de forma independiente como en colaboración con un maestro humano que estuvo de pie junto a él durante aproximadamente media hora, entreteniendo a los más de 950 miembros de la audiencia que habían llenado el Teatro Nacional de Corea.
El robot recibió una lluvia de aplausos cuando apareció por primera vez desde debajo del escenario en un ascensor y se volvió para mirar a la audiencia, inclinándose en señal de saludo.
A lo largo de la actuación, los ojos azules del robot miraron sin pestañear a los músicos, solo asintiendo con la cabeza al ritmo de la música.
Una actuación impecable
El novato tuvo un buen desempeño en su debut en el escenario, dijeron los miembros de la audiencia.
Eso sí, la máquina no es capaz de escuchar o improvisar en tiempo real, dicen sus desarrolladores.
«Vine aquí preocupado de si este robot podría lograr esto sin problemas», dijo Kim Ji-min, un estudiante universitario de 19 años que se especializa en música.
«Pero me pareció que estaba en gran armonía con los músicos… Se sentía como un mundo completamente nuevo para mí».
Si bien ha habido actuaciones musicales dirigidas por conductores robóticos en el pasado, incluido un concierto de 2017 dirigido por el robot YuMi en Italia, esta fue la primera vez que los surcoreanos pudieron presenciar a un director robótico en el escenario.
Ahora tratarán que haga gestos
EveR 6, desarrollado por el estatal Instituto de Tecnología Industrial de Corea, fue programado para replicar los movimientos de un conductor humano a través de la tecnología de captura de movimiento.
Los desarrolladores de EveR 6 están trabajando actualmente para permitir que el robot haga gestos que no están preprogramados, dijo Lee Dong-wook, ingeniero del robot.
Improvisar y comunicarse con los músicos en tiempo real es el siguiente gran paso, dijo Song Joo-ho, un columnista de música que vino a ver la actuación.
«Necesita improvisar en tiempo real cuando los músicos cometen un error o las cosas salen mal».
