Por: José Eliécer Palomino Rojas
Su cuerpo humano frágil, y Juvenil, hizo crecer raíces de paz, ternura, solidaridad, entrega y amor en la familia y en sus amigos…
Si infinitos fueran en realidad la mirada y el latir del corazón, como resultado de la unión terrenal y la divina…
Nueve meses que cargó y arrulló aquellos brazos firmes, sinceros y tiernos de madre…
Ahora entonces, desde la estancia, convertido el ser amado, en viajero a la eternidad misteriosa e insondable…
Su cuerpo convertido en polvo de ceniza fría, hace volver a la madre con sus brazos firmes, sinceros, amorosos y tiernos, a cargar y consentir, ya no aquel cuerpo humano, frágil y Juvenil, que hizo crecer raíces de paz, ternura, solidaridad entrega y amor en la familia y amigos…
Sino a cargar el cofre de madera dura y fría, lleno de polvo de ceniza, en las nueve noches de misa, asentado frente a la fotografía cálida y semisonriente, en medio de aromas de arreglos florales de pétalos blancos, frágiles, variados y Pálidos, como el reflejo de la fría mirada de la amiga muerte…
En realidad, nada sabemos del lugar donde llegaremos, después de la muerte, pero la verdad de aquel lugar lleno de misterio, se alimenta cada día en lo profundo de nuestra fe humana…

A la vista en la sagrada Biblia, nos cuenta cómo Yahveh extendió tierra sobre las aguas, transformada en ríos, mares y océanos, así mismo el cuerpo humano sin herramienta de observación, se transforma al viajar y al trascender su alma a la eternidad…
En suma, viajeros somos y junto a ese viaje triste y doloroso, el corazón, la mente y el alma, de los que un día fueron y compartieron con la madre, hermanos, sobrinos y amigos, en su tránsito de lo terrenal a lo espiritual, algún día se encontrarán con el brillo de la misteriosa eternidad.
Siempre tus raíces de paz, ternura, solidaridad y amor, servirá de guía y viva memoria, en el reflejo de ese vínculo de tono de voz sonora y corazón cálido, que momento a momento, unía con armonía en el plano terrenal, pero ahora, segundo a segundo, estará presente desde un nuevo plano espiritual. D.E.P Jhon Jaime Jaramillo Calle, Viajero a la eternidad misteriosa e insondable.
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