Tegucigalpa, Honduras – La viceministra de Seguridad de Honduras, Julissa Villanueva, enfrenta un posible requerimiento fiscal en su contra, lo cual, según sus declaraciones, estaría motivado por sus críticas y revelaciones sobre la actuación de la Policía Nacional en la masacre de 46 mujeres en la cárcel de Támara el pasado 20 de junio de 2023.
Villanueva, durante una entrevista con Hable Como Habla (HCH), expresó su preocupación por lo que considera un intento de silenciar su voz crítica dentro de la administración.
La acusación que se cierne sobre ella incluiría cargos de abuso de autoridad y revelación indebida de información confidencial. “Es un intento claro de represalia por denunciar las irregularidades y la infiltración de bandas criminales dentro de la Policía Nacional”, dijo Villanueva. La viceministra asegura que, pese a las amenazas, su compromiso con la verdad y la seguridad en Honduras sigue intacto.
Agregó que ha sido informada por el general encargado del CEFAS de que se le acusará formalmente, situación que, según ella, demuestra las complejidades y los desafíos de su cargo. A pesar de las adversidades, Villanueva reiteró que solo dejará su posición si así lo decide la presidenta de Honduras, bajo cuya administración ha servido desde su nombramiento.
Esta situación destapa una vez más los retos que enfrenta Honduras en su lucha contra la corrupción y el crimen organizado dentro de sus instituciones estatales. La viceministra prometió que revelará más pruebas y detalles sobre sus acusaciones en el momento adecuado, insistiendo en que su lucha es por la justicia y la transparencia en el manejo de los asuntos de seguridad del estado.
