Tegucigalpa. – Tras varios meses recibiendo tratamiento médico en Estados Unidos por una explosión de un potente petardo que le desfiguró el rostro, el joven hondureño, Wilson Berríos retornó al país con un óptimo estado de salud.
Al arribar a su patria, Berríos mostró un impresionante estado de ánimo, y destacó que aún deben realizarle cuatro cirugías para reconstruirle la nariz, las cuales le practicarán en el momento que los médicos consideren conveniente.
No obstante, Berríos manifestó su alegría porque la vida le dio una nueva oportunidad, y resaltó la fortaleza de su familia, quienes siempre tuvieron esperanzas pese a los momentos adversos que pasaron.
Asimismo, hizo referencia a que su proceso de recuperación es difícil y extenso, pues en las primeras semanas de operaciones sentía un dolor incesante en los pómulos, por lo que debían aplicarle medicamentos cada tres horas para contrarrestar las molestias.
El ya popular y querido hondureño explicó que él no le guarda rencor a ninguno de sus atacantes, quienes asegura en este momento, “se han de sentir culpables y le deben pedir perdón a Dios”.
Por su parte, su padre Wilson Berríos, agradeció al pueblo hondureño por todo el apoyo que le brindaron a su hijo durante sus etapas más críticas.
Cabe recordar que, en diciembre de 2019, Berríos sufrió graves quemaduras en su rostro luego de que tres sujetos le lanzarán un petardo conocido como “cebolla” que le explotó en la cara, en una villa navideña en Choluteca.
Es importante mencionar que, las autoridades policiales lograron capturar a cada uno de los individuos que tanto daño le causaron a la familia Berríos-Sauceda.