Los esfuerzos diplomáticos se intensifican este domingo para alcanzar una tregua y la liberación de rehenes en Gaza, y el movimiento islamista palestino Hamás anunció que responderá el lunes a la última propuesta israelí para poner fin a los bombardeos en el territorio.
“Una delegación de Hamás, encabezada por Khalil Al Hayya, llegará mañana a Egipto (…) y dará la respuesta del movimiento” a la propuesta israelí, declaró un alto cargo del grupo islamista palestino a la AFP.
El gobierno israelí enfrenta crecientes presiones internas e internacionales para llegar a un acuerdo que permita poner fin a casi siete meses de guerra en Gaza, gobernada por Hamás desde 2007.
Khalil Al Hayya, número dos del brazo político de Hamás en Gaza, informó el sábado que el movimiento estaba estudiando su respuesta a una contrapropuesta israelí.
Catar, Egipto y Estados Unidos tratan de mediar un nuevo cese el fuego en el estrecho y devastado territorio, donde la casi totalidad de la población está al borde de la hambruna, según la ONU.
El portal de noticias Axios, citando a dos altos cargos israelíes, informó que la última propuesta israelí incluía la voluntad de debatir el “restablecimiento de una calma sostenible” en Gaza tras la liberación de rehenes.
Es la primera vez en casi siete meses de guerra que los dirigentes israelíes sugieren que están abiertos a discutir el fin de la guerra, según Axios.
Una fuente de Hamás cercana a las negociaciones afirmó a AFP que el grupo estaba “abierto a discutir la nueva propuesta de manera positiva”.
La fuente agregó que el grupo estaba “deseoso de alcanzar un acuerdo que garantiza un alto el fuego permanente, el regreso de los desplazados, un acuerdo aceptable para el intercambio [de prisioneros] y el fin del asedio” en Gaza.
Nuevo impulso de las negociaciones
En el terreno, el Ministerio de Salud de Gaza informó que al menos 66 personas murieron en bombardeos israelíes contra el territorio en las últimas 24 horas.
Los ataques alcanzaron las ciudades de Jan Yunis y Rafah, en el sur, así como Ciudad de Gaza, en el norte, según un corresponsal de AFP.
Las esperanzas de una posible nueva tregua coinciden con las presiones internacionales para disuadir a Israel de invadir Rafah, una ciudad del sur de la Franja de Gaza donde se hacinan 1,5 millones de personas, en su mayoría desplazados de guerra.
El presidente palestino Mahmud Abás aseguró en un foro económico en Arabia Saudita que solo Estados Unidos podía detener una operación militar de este tipo, que sería “el mayor desastre en la historia del pueblo palestino”.
Abás habló en el Foro Económico Mundial (FEM) que comenzó el domingo en Riad, en el que participan numerosos dirigentes y mediadores en el conflicto como el secretario del Estado estadounidense, Antony Blinken.
Aunque Israel no esté presente, la cita será “una ocasión para tener conversaciones estructuradas” con “actores clave”, afirmó el presidente del foro, el noruego Borge Brende.
Hay “un nuevo impulso en las conversaciones en torno a los rehenes, y también hacia (…) una posible salida del punto muerto en el que nos encontramos en Gaza”, afirmó.
Más de 34.000 muertos en Gaza
El conflicto comenzó el 7 de octubre, con una incursión de milicianos islamistas que mataron a 1.170 personas, en su mayoría civiles, en el sur de Israel y secuestraron a unas 250, según un recuento de AFP en base a datos oficiales israelíes.
La ofensiva de represalias israelí dejó hasta el momento 34.454 muertos en Gaza, en su gran mayoría civiles, sobre todas las mujeres, adolescentes y niños, según el Ministerio de Salud del territorio.
Las autoridades israelíes calculan que aún hay 129 rehenes cautivos en Gaza, 34 de los cuales habrían fallecido. La última tregua a finales de noviembre permitió canjear 80 rehenes por 240 presos palestinos.
El grupo islamista difundió el sábado un vídeo en el cual dos de los rehenes que mantienen cautivos en Gaza urgen al gobierno israelí a alcanzar un acuerdo para que puedan recuperar su libertad.
Poco después, una multitud se congregó en Tel Aviv para exigir la liberación de los rehenes al primer ministro Benjamín Netanyahu.
“Sigan protestando, para que haya un acuerdo ahora”, dijo en la grabación Omri Miran, uno de los dos rehenes.
En el centro de Gaza, Mohammed al Hattab encontró a su niño de apenas un año entre los escombros, después de un bombardeo israelí contra el campamento de refugiados de Nuseirat.
El niño está siendo tratado por una fractura de cráneo, mientras que la cara de su hija de dos años quedó “completamente desfigurada”, dijo a la AFP.
El ejército israelí afirmó haber golpeado a decenas de objetivos terroristas. Israel, al igual que Estados Unidos y la Unión Europea, considera a Hamás como una organización terrorista.