Tegucigalpa – Un reciente incidente ha generado debate en Honduras después de que se descubriera que una escuela construida por el filántropo e influencer japonés Shin Fujiyama porta una placa que atribuye la obra al gobierno de la presidenta Xiomara Castro.
La escuela Álvaro Contreras, ubicada en la aldea Santa Anita, Concepción, en el departamento de Ocotepeque, fue inaugurada por Fujiyama el pasado domingo 27 de octubre, pero pocos días después apareció con una placa gubernamental.
El ministro de Educación, Daniel Esponda, anunció recientemente que las escuelas construidas o remodeladas por Shin Fujiyama serían incluidas en el listado oficial de centros educativos entregados por el Estado. Sin embargo, este anuncio ha sido interpretado por algunos como un intento del gobierno de acreditarse las obras realizadas por el influencer japonés.
La controversia tomó fuerza cuando un video en TikTok, publicado por el creador de contenido salvadoreño Joseph Isaak, se volvió viral. En la grabación, Isaak muestra la placa colocada en una de las aulas y comenta: «Estamos en una escuela que ha arreglado Shin.
La escuela tiene tres aulas y aquí hay una placa que dice que fue trabajada por el gobierno de Honduras». El video superó las 25,000 visualizaciones en poco tiempo.
La placa en cuestión incluye el nombre del centro educativo junto al de la presidenta Xiomara Castro y el ministro de Educación, Daniel Esponda, sin mencionar a Shin Fujiyama. Este hecho generó una ola de críticas en redes sociales. Usuarios como Mirian García expresaron su indignación: «Este gobierno no conoce la vergüenza».
Otro comentario de Tifany Cantoral señaló: «Ya dijo Esponda que se van a apropiar de todos los proyectos de Shin. Deberían arrancar esas placas y avisarle a Shin y a los patrocinadores».
Isaak también mencionó que habitantes de la aldea le informaron que fue Fujiyama quien construyó la escuela. «Un empleado me dijo que esta aula la hizo el gobierno, pero las otras dos las hizo Shin. ¿Qué opinan ustedes? ¿Deberían tener la placa de Shin las aulas que él construyó o está bien solo con la del gobierno?», cuestionó en su video.
Es importante recordar que durante la inauguración de la escuela, Shin Fujiyama dedicó el logro a sus seguidores y benefactores, especialmente de México. «Hoy esta escuela inaugurada, quiero dedicarla a los amigos y amigas de México porque ellos fueron el primer país que me apoyó», expresó el filántropo.
Hasta la fecha, Fujiyama continúa su desafío de recorrer 3,000 kilómetros para promover la educación en Honduras y ha logrado recaudar más de 500,000 dólares. Su compromiso ha sido ampliamente reconocido tanto a nivel nacional como internacional.
La situación ha generado un debate sobre el reconocimiento y atribución de esfuerzos en obras sociales y educativas. Mientras algunos defienden la inclusión de las escuelas en el listado oficial del Estado como una formalidad administrativa, otros consideran que es fundamental reconocer el trabajo y las contribuciones de quienes hacen posible estos proyectos.
Ni el gobierno ni el Ministerio de Educación han emitido un comunicado oficial respecto a la polémica suscitada. Por su parte, seguidores y simpatizantes de Shin Fujiyama esperan que se aclare la situación y se brinde el merecido reconocimiento al filántropo por su labor en favor de la educación hondureña.