Tegucigalpa – Una marcada contradicción ha surgido entre las declaraciones oficiales y la realidad que enfrentan los consumidores hondureños respecto a los precios de la canasta básica, especialmente en el caso del huevo, que se ha convertido en el centro de la polémica.
José Enrique Santos, director de Protección al Consumidor de la Secretaría de Desarrollo Económico (SDE), aseguró en una entrevista con TSI que «no ha habido incremento realmente, más bien se han ido hacia la baja a pesar que han pasado muchas cosas en el país». Sin embargo, esta afirmación contrasta drásticamente con los reportes de los consumidores y organizaciones civiles.
El caso más emblemático de esta disparidad es el precio del huevo. Mientras la SDE estableció precios regulados de 80, 70 y 60 lempiras según el tamaño del cartón, la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica de Honduras (Adecabah) ha documentado precios superiores a los 90 lempiras en los mercados capitalinos.
En San Pedro Sula, la situación es aún más crítica, donde el cartón ha superado la barrera de los 100 lempiras.
Esta situación pone en evidencia un desafío directo a las medidas gubernamentales de control de precios, y plantea interrogantes sobre la efectividad de los mecanismos de regulación implementados por las autoridades. Los consumidores continúan reportando alzas en diversos productos de la canasta básica, contradiciendo directamente la postura oficial.
El contraste entre las declaraciones gubernamentales y la realidad del mercado sugiere la necesidad de una revisión más exhaustiva de los mecanismos de control de precios y una mayor vigilancia en su cumplimiento, especialmente en momentos donde el costo de vida representa una preocupación creciente para las familias hondureñas.