Tegucigalpa – En medio de la controversia generada por la reciente aprobación nocturna del Presupuesto General 2025, el titular del Poder Legislativo, Luis Redondo, ha marcado una línea divisoria entre las sesiones prolongadas de su gestión y los cuestionados «madrugones» históricos del Congreso Nacional.
Durante su intervención, Redondo hizo un recorrido por los episodios más controvertidos de la historia reciente del Legislativo, recordando específicamente el 12 de diciembre de 2012, fecha en que se destituyó a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, así como la aprobación de las ZEDE y los posteriores nombramientos de magistrados sustitutos.
«Vamos a sesionar las horas que sean necesarias y en cualquier horario, pero no con madrugones de corrupción y narcotráfico», enfatizó Redondo, estableciendo una clara distinción entre las prácticas del pasado y su actual administración. El presidente del Congreso defendió la legitimidad de las ocho sesiones nocturnas realizadas bajo su gestión, argumentando que estas han servido a los intereses del pueblo hondureño.
En un mensaje directo a la ciudadanía, Redondo reafirmó su compromiso con la agenda legislativa, anunciando que el próximo objetivo será la aprobación de la Ley de Justicia Tributaria. Además, lanzó una advertencia a los diputados que no cumplen con sus responsabilidades parlamentarias, criticando específicamente a aquellos que «sólo van al Congreso a tomarse la foto».
La declaración de Redondo llega en un momento de intenso debate público sobre los métodos de trabajo del Congreso Nacional, especialmente tras la reciente renuncia de la diputada Ligia Ramos a la Comisión de Energía, quien cuestionó la transparencia en los procedimientos legislativos nocturnos.
Esta postura del presidente del Congreso busca establecer un nuevo paradigma en la conducción de las sesiones legislativas, prometiendo mantener la eficiencia sin comprometer la transparencia y legitimidad de los procesos parlamentarios hondureños.