Tegucigalpa.– El naufragio del barco “Capitán Wally” que provocó la muerte de 27 pescadores y mantiene desaparecidos a seis, en aguas del Caribe de La Mosquitia hondureña, pudo suceder debido a sobrepeso de la embarcación y factores climatológicos.
El miércoles pasado la embarcación langostera zozobró cerca de los cayos Media Luna y Vivorillo, en aguas de La Mosquitia, en el nororiental departamento de Gracias a Dios, fronterizo con Nicaragua, dejando la muerte de 27 tripulantes, la desapareción de seis y el rescate de más de 50.
En el rescate de los ahogados y los sobrevivientes participaron la patrullera Lempira y otras embarcaciones de la Fuerza Naval y del sector privado que contribuyeron a su traslado a la base naval de la laguna de Caratasca, en las costas de la cabecera departamental Puerto Lempira.
La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), con el apoyo de helicópteros de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH), trasladó atáudes a la base naval de Caratasca y contrató el armado de otro tanto en la zona, de forma que los parientes pudieron sepultar el viernes y sábado rápidamente a los fallecidos porque ya estaban en estado descomposición.
El director de la Marina Mercante, Juan Carlos Rivera, señaló que los náufragos fueron encontrados mediante un monitoreo satelital, ya que uno de lo requisitos más importantes de los barcos es usar un Sistema de Posicionamiento Global (GPS).
El funcionario relacionó que eso facilitó que las embarcaciones de la flota pesquera pudieran llegar para auxiliar a los faenadores y si bien no concluyen las investigaciones no descartan que el naufragio haya ocurrido por el sobrepeso del barco y factores climáticos.
Un equipo de la Marina Mercante, Fuerza Naval y otras instituciones, prosigue recabando testimonios de sobrevivientes para conocer la verdad. Rivera señaló que “tenemos algunos avances, pero estamos levantando declaraciones, ya tenemos la revisión documental y técnica de ambas embarcaciones”.
La madrugada del miércoles también zozobró en aguas de La Mosquitia, el barco langostero “Miss Francely”, cuyos tripulantes afortunadamente fueron rescatados vivos.
Rivera afirmó que “hemos identificado que ambas embarcaciones tenían sobrepeso”, como también sobrevivientes han contado que les sobrevino una gigante “ola muerta” que le dio “vuelta de campana” al barco “Capitán Wally”.
Organizaciones y autoridades, como el alcalde de Puerto Lempira, José Edgardo Saición, han elevado sus voces de protesta por el abandono en que los gobiernos han tenido al pueblo misquito, solicitando proyectos sociales y fuentes de empleo que contribuyan a evitar tragedias.