Tegucigalpa. – Al menos tres menores muertos y unos 17 heridos fue el resultado de una reyerta que se desató a eso de las 5:15 de la tarde en el interior del centro de internamiento para menores infractores “Renaciendo”, localizado en la aldea de Támara, Francisco Morazán, al norte de la capital hondureños.
Dos de los fallecidos fueron identificados como José Luis Sierra Cruz y Harrison Arambú, quienes recibieron múltiples heridas de arma blanca en casi todo su cuerpo.
Extraoficialmente anoche se informaba de más muertos y heridos, pero ese extremo no se pudo comprobar con las autoridades, quienes en todo momento intentaron no dar la información, pues había mucha confusión en la riña de los menores infractores.
Los heridos, un total de 17, fueron trasladados en vehículos “paila” hacia el Hospital Escuela Universitario (HEU), pero lamentablemente en el trayecto hacia el centro hospitalario fallecieron dos muchachos.
Al hospital se apersonaron varios de los familiares de los jóvenes infractores, quienes querían saber si sus parientes habían salido muertos o heridos, lo cual ocasionó momentos de angustia, sumado a la enorme cantidad de curiosos, la mayoría de ellos eran allegados a los pacientes rutinarios del HEU.
Mientras algunos familiares de los fallecidos lloraban y sufrían desmayos, en el estacionamiento del centro asistencial, los otros muchachos gravemente heridos eran ingresados a la sala de emergencia del principal centro hospitalario del país.
Los jóvenes presentan heridas en la cabeza y en diferentes partes de su cuerpo, ya que para enfrentarse utilizaron cuchillos rudimentarios, palos, pedazos de varilla y hasta piedras.
Las “pailas” de los automotores estaban impregnados de sangre de las víctimas, quienes tienen sus rostros muy desfigurados y sus ropas cortadas.
Hay que destacar que la mayoría de los internos en Renaciendo son jóvenes infractores que están internos por el delito de extorsión y delitos conexos.
Para poder controlar el enfrentamiento entre los jóvenes infractores fue necesaria la intervención del centro de detención, quienes fueron apoyados por efectivos de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina), informó el abogado Felipe Morales, director delInstituto Nacional para la Atención de Menores Infractores (INAMI).
El funcionario añadió que en Renaciendo hay jóvenes de la pandilla 18 y de la población común y un pequeño grupo que se hace denominar “Los Cristianos”.
En total no pasan de 80 los jóvenes infractores en el Centro de Menores Renaciendo, apuntó Morales.
