Tegucigalpa – En una detallada conferencia de prensa, Luis Miranda, el subsecretario adjunto de comunicaciones del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), compartió preocupantes cifras y advertencias relacionadas con la migración hondureña en la frontera.
Durante los últimos dos meses, un total de 31 mil hondureños han sido detenidos en este contexto, siendo un hecho inquietante que el 50 por ciento de ellos pertenezcan a unidades familiares.
En un esfuerzo por disipar las creencias erróneas fomentadas por coyotes y traficantes de personas, Miranda destacó que aproximadamente la mitad de los hondureños viajan en grupos familiares. Hizo hincapié en la importancia de no sucumbir ante las falsedades y engaños que los coyotes promueven para atraer a los migrantes hacia travesías ilegales.
El aumento en la migración ilegal de hondureños se ha vuelto evidente y alarmante, según lo señalado por Miranda. Los cárteles ven en los migrantes una oportunidad de negocio, explotando su vulnerabilidad y generando una serie de impactos negativos que van desde extorsiones hasta abusos y secuestros.
Miranda recalcó la determinación de las autoridades en la protección de la frontera y la implementación firme de las leyes. Subrayó que, en esta etapa, están actuando con mayor contundencia que nunca. En cuanto a los 31 mil hondureños detenidos, informó que algunos ya han sido deportados, mientras que otros están en proceso de serlo.
En las diversas fronteras de México, grupos de hondureños buscan desesperadamente cruzar hacia Estados Unidos. Sin embargo, Miranda enfatizó que aquellos que opten por la vía ilegal enfrentarán graves consecuencias. Además del riesgo personal y la incertidumbre, cruzar sin autorización puede llevar a que sean vetados durante más de cinco años para ingresar legalmente.
La situación se torna aún más seria para aquellos que reinciden en cruzar ilegalmente. Miranda advirtió que enfrentarán procesos legales, lo que afectará aún más sus posibilidades de obtener permisos de ingreso legales. En contraposición, subrayó que el enfoque del gobierno es tratar el tema de la migración de manera responsable y humana.
En un esfuerzo por proporcionar alternativas a la migración ilegal, Miranda compartió que se han expandido las vías legales para el ingreso de personas. Esto se ha llevado a cabo con la intención de aliviar las necesidades de aquellos que buscan oportunidades en Estados Unidos. Este enfoque busca abordar el problema desde una perspectiva más compasiva y solucionadora.
