Tegucigalpa – La jornada de hoy en el Congreso Nacional estuvo marcada por un incidente inesperado que generó gran conmoción. La bancada del Partido Nacional denunció con vehemencia la negativa de la junta directiva del Congreso Nacional de permitirles el acceso a este importante poder del Estado.
Nelson Márquez, subjefe de la bancada nacionalista, manifestó su frustración ante lo que describió como un acto de obstrucción flagrante.
Márquez, visiblemente molesto, informó a los medios de comunicación que cubrían la fuente legislativa sobre la situación. «Había orden en la seguridad de no dejarnos entrar, los ilegales para lo único que sirven es no dejar que los diputados cumplan con sus funciones», expresó con firmeza el congresista nacionalista.
Las tensiones políticas en el Congreso Nacional parecen haber alcanzado un punto álgido, con acusaciones cruzadas y una atmósfera de polarización cada vez más evidente.
El llamado de Márquez a los diputados liberales para unirse a la iniciativa de convocar sesiones extraordinarias resonó con fuerza en el recinto. «Si la junta directiva del Congreso Nacional no toma medidas, tendremos que tomar la iniciativa y convocar sesiones extraordinarias.
Es crucial que los ministros asuman plenamente sus responsabilidades y desempeñen sus funciones de manera adecuada», instó con determinación.
A medida que la incertidumbre y la frustración prevalecen en el Congreso Nacional, se espera un desarrollo crucial en los próximos días.
Las llamadas a la acción y los reclamos por un funcionamiento transparente y efectivo del poder legislativo se intensifican en un ambiente político cada vez más tenso.
