Tegucigalpa. – Los hospitales móviles comprados por Inversión Estratégica de Honduras (Invest-H), cuando Marco Bográn fungía como director ejecutivo, continúan en el ojo del huracán y a tres meses de su llegada al país continúan sin poder utilizarse.
Esto, tras que se revelara el informe realizado por la misión técnica de Invest-H que viajó hace más de un mes a Turquía para supervisar los restantes hospitales, de los cuales, dos ya se encuentran en camino.
El informe de Invest-H fue elaborado por la ingeniera biomédica, Ericka Meléndez, y los expertos Sireya Díaz y Carlos Maldonado, quienes especificaron un total de 57 observaciones sobre el estado de los hospitales.
En la mayoría de los aspectos enlistados, se detalla sobre desperfectos e inconsistencias en los hospitales que tuvieron un costo de casi 1.2 millones de lempiras.
Según la comisión, hay fugas en la presión de módulos de la Unidad de Cuidados Intensivos, algunas puertas se desploman, brotan malos olores de los baños y cocina y en el techo se acumula agua.
“Se rechazan las máquinas de anestesia, indicar cuando se hará el cambio de los 16 ventiladores mecánicos”, cita el texto.
De igual forma, notificaron que la máquina de ultrasonido tiene una clave de acceso al software que venció en 2018.
Hasta el momento, dos de los cinco hospitales móviles, restantes, ya se encuentran en aguas caribeñas y se espera que arriben a Puerto Cortés en las próximas semanas.
Ante estas revelaciones, el secretario ejecutivo del Foro Nacional de Convergencia (Fonac), y dirigente de la sociedad civil, Omar Rivera, manifestó que tanto Invest-H, como la Procuraduría General de la República, debe proceder legalmente por el incumplimiento del contrato. “Seis meses después de haber pagado la totalidad de hospitales móviles, deberían estar funcionando de forma óptima”, escribió en su cuenta de Twitter.
