Tegucigalpa. – En su doceavo informe de la corrupción en tiempos de la Covid-19, el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), reveló una serie de irregularidades entorno al “hospital móvil” adquirido por la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), para el municipio de Villanueva, Cortés, norte de Honduras.
El CNA asegura que la “carpa” que compró Copeco como un hospital móvil, tendría una diferencia en su precio que asciende a 693 mil 245.82 lempiras, además de que su estado actual “es disfuncional e inoperativo en vista que los daños a su infraestructura son irreparables”.
De acuerdo al análisis hecho por la organización de sociedad civil, cotizaron un “hospital móvil” para 10 pacientes que, sumado el flete marítimo, su valor sería de cuatro millones 461 mil 233.70 lempiras, “por lo que al analizar el costo de la carpa adquirida por Copeco que fue por cinco millones 516 mil800.71 lempiras, existe una diferencia de 693 mil 245.82 lempiras”.
En ese sentido, el CNA considera que esta adquisición es un perjuicio para el Estado de Honduras “visto que este tipo de instalaciones no son aptas para pacientes con enfermedades altamente contagiosas tales como la Covid-19”.
Según el CNA, las razones para determinar que es una “carpa” y no un hospital móvil es debido a la falta de equipo médico necesario para el tratamiento de pacientes con coronavirus, así como su ubicación que evita mantener una higiene adecuada ya que sus pisos están llenos de lodo y solo algunos aires acondicionados están funcionando.
Por otro lado, el organismo señala que el monto erogado por Copeco pudo utilizarse para ventiladores mecánicos, equipos de oxigenoterapia de alto flujo y monitores de signos vitales.
Cabe mencionar que, “ciudadanos de Villanueva manifestaron que no desean seguir acudiendo a esta sala de triaje, dado que el lugar es caluroso, húmedo y fangoso; así como la gran cantidad de insectos como zancudos que podrían portar dengue”, dice el informe.
Es oportuno señalar que el Ministerio Público tiene una línea de investigación en torno a esta adquisición, por lo que ya secuestró documentación y tomó las declaraciones del extitular de Copeco, Gabriel Rubí, igualmente el de otros funcionarios.