Tegucigalpa. El voraz incendio que se desató en las últimas horas en la zona de El Hatillo y se extendió al parque nacional La Tigra, conocido como el pulmón de Tegucigalpa, consumió cerca de 400 hectáreas de bosque, según informó el alcalde capitalino, Jorge Aldana.
El aterrador incendio, que estalló la tarde de este lunes en la zona de amortiguamiento del Parque Nacional La Tigra y se extendió a áreas cercanas a zonas urbanas con fuentes de agua, fue extremadamente destructivo.
Miembros del Cuerpo de Bomberos de Honduras (CBH), el Instituto Nacional de Conservación y Desarrollo Forestal, Áreas Protegidas y Vida Silvestre (ICF), la Fundación Amigos de la Tigra y la Fuerza Aérea de Honduras colaboraron para poner fin al incidente.
Tras 24 horas de arduo trabajo lograron apagar el fuego en las faldas del cerro El Trigo entre El Hatillo y El Chimbo, localidad cercana al Parque Nacional La Tigra, en esta capital.
Aldana comentó el hecho diciendo: “creo que los que queman los bosques merecen cárcel de por vida, hemos registrado la quema de 400 hectáreas de bosques en La Tigra”.
Sin embargo, agregó que el fuego estaba a punto de ser contenido gracias a una serie de fuerzas. “No podemos descartar que este incendio haya sido provocado para construir viviendas en esta zona muy cotizada, pero gracias a las diferentes fuerzas el incendio está a punto de ser controlado”, dijo.
Mientras que la Fuerza Aérea Hondureña (FAH) atacó la línea de fuego desde el aire y contuvo con éxito su avance, el equipo entabló combate utilizando una estrategia de línea húmeda para detener el avance de la línea de fuego.
El fuego se propagó por muchos sectores diferentes, lo que dificultó su extinción. Miembros del Cuerpo de Bomberos explicaron que las descargas de agua del helicóptero de la Fuerza Aérea equipado con el sistema Bambi Bucket comenzaron desde la madrugada.
El Instituto de Conservación Forestal (ICF) también informó el martes que el incidente resultó en la destrucción de al menos 400 hectáreas de bosque.
Según el Cuerpo de Bomberos, es el segundo incendio más grande del año después del que se reportó en Celaque.
Gerardo Servellón, miembro de Amitigra, dijo: “Es lamentable lo que está pasando”.
Sin embargo, los hechos de ayer a hoy llegaron a afectar una regeneración de árboles que ya teníamos de unos seis metros de altura y ayer se derrumbó todo”, dijo el activista ambiental, a pesar de que en las últimas semanas ha habido incendios frecuentes.
Según él, llevan varios años cuidando la regeneración de pinos y otras especies como encino, liquidámbar y encino, pero todo se ha perdido y tardará entre cinco y seis años en recuperarse, dependiendo de la situación. campañas que se realizan.
Lamentó el desenlace de la situación y dijo que incuestionablemente hay una implicación delictiva; “no tenemos ni la menor duda”. Es lamentable como resultaron las cosas, agregó.
Recordó que el 90% de los incendios se inician de manera intencional y que estos delitos frecuentemente quedan impunes.
