Tegucigalpa – Según el Balance Finaciero de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), la mayor parte de la deuda de la estatal ha sido contratada con bancos y con organismos internacionales, al representar el 76% sus pasivos totales que ascienden a 91,420 millones de lempiras.
Del monto anterior, la deuda externa e interna a largo plazo es de 53,851 millones de lempiras y la de corto plazo suma 15,592 millones de lempiras, incluyendo intereses por 4,051 millones de lempiras.
A la deuda pública se le deben sumar los compromisos que tiene la ENEE con los proveedores de energía, por un monto de 16,479 millones de lempiras a enero de 2022, cifra que equivale a unas 7 facturas pendientes de pago.
Así mismo, se deben contar los pasivos laborales y comerciales de la estatal por el orden de 5,394 millones de lempiras.
Ante el escenerio anterior, expertos en la materia sostienen que el rescate de la ENEE radica en reducir las pérdidas técnicas y no técnicas, mismas que superan actualmente el 30% y que se traducen en una fuga de ingresos de unos 350 millones de dólares al año.
Así mismo, los especialistas son de criterio que otra de las medidas urgentes para la estatal es reperfilar su deuda actual, a fin de incrementar progresivamente sus ingresos.
Por su parte, el Secretario de la Presidencia, Héctor Manuel Zelaya, manifestó que la ENEE “está perdiendo un millón de dólares al día y una empresa que pierde un millón de dólares al día no es sostenible”, por lo que aseguró que el Gobierno de la República avanza en la integración de un acuerdo nacional para recuperar de una vez por todas a la estatal.