Casi la mitad del agua del grifo en Estados Unidos está contaminada con sustancias químicas conocidas como “productos químicos para siempre”, según un nuevo estudio del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés).
Por CNN
Sin embargo, el número de personas que beben agua contaminada puede ser aún mayor de lo que revela el estudio, ya que los investigadores no pudieron analizar todas estas sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas, o PFAS, sustancias químicas consideradas peligrosas para la salud humana.
Las PFAS son una familia de sustancias químicas sintéticas omnipresentes que permanecen en el medio ambiente y en el cuerpo humano. La exposición a los PFAS está relacionada con problemas como el cáncer, la obesidad, las enfermedades tiroideas, el colesterol alto, la disminución de la fertilidad, los daños hepáticos y la supresión hormonal, según la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.
En junio de 2022, basándose en los últimos datos científicos, la EPA emitió advertencias sanitarias en las que afirmaba que las sustancias químicas son mucho más peligrosas para la salud humana de lo que los científicos pensaban en un principio y que probablemente son más peligrosas incluso a niveles miles de veces inferiores a los que se creía.
Hay más de 12.000 tipos de PFAS en total, según los Institutos Nacionales de Salud, pero solo 32 de los compuestos pueden ser detectados por las pruebas de laboratorio desarrolladas por el USGS.