Tegucigalpa – Este sábado fue un día de celebración y compromiso en la Basílica Nuestra Señora de Suyapa, en la capital hondureña, donde dos nuevos presbíteros, los padres Eduin Figueroa y Samuel Salgado, recibieron la ordenación por imposición de manos de Monseñor José Vicente Nácher Tatay.
El padre Salgado, destinado a servir en la Parroquia San Juan Bautista del Municipio de Ojojona, Francisco Morazán, originario de San Juan del Rancho, comparte su agradecimiento a Dios por crecer en una familia católica.
Recuerda la influencia positiva de sus padres como delegado de la Palabra de Dios y Catequista, que cimentaron valores cristianos y humanos en su vida. Su respuesta vocacional es el fruto de la fe arraigada desde su infancia.
Por otro lado, el padre Figueroa, quien servirá en la Parroquia Nuestra Señora de Suyapa (Basílica), proviene del municipio de Curaren al sur de Francisco Morazán. En su relato, destaca el ambiente católico en el que creció y la devoción inculcada a los Sacramentos y al Sacerdocio desde temprana edad.
Su llamado a la vocación sacerdotal se gestó mientras estudiaba en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, y después de un año de discernimiento, ingresó al Seminario Mayor Nuestra Señora de Suyapa.
Ambos presbíteros, ahora comprometidos con el servicio a la comunidad, expresaron su gratitud y dedicación a través de sus historias personales. La comunidad católica celebra este acontecimiento y espera con alegría la contribución pastoral de estos nuevos sacerdotes en las parroquias donde fueron asignados.