Tegucigalpa – El exministro de Transparencia y exfiscal de la República, Edmundo Orellana, expresó este sábado contundentes críticas hacia los organismos involucrados en el proceso electoral, afirmando que éstos «ya no tienen mérito para continuar en esas funciones». Orellana manifestó su desconfianza hacia estas instituciones y «fundamentalmente en sus titulares», señalando que «difícilmente podemos esperar que ellos asuman la responsabilidad de las elecciones generales».
En sus declaraciones, Orellana recordó que los consejeros del Consejo Nacional Electoral (CNE) actúan como representantes de los tres principales partidos políticos del país, por lo que hizo un llamado a los dirigentes de estas organizaciones para que «pongan orden a los niños que tienen ahí, que les digan qué deben hacer y qué no deben hacer, que se comporten porque están generando inestabilidad política que afecta al país».
El exfuncionario se refirió al incidente ocurrido el viernes entre la consejera Cossette López y el jefe de las Fuerzas Armadas, Roosevelt Hernández, calificándolo como «la prolongación de una crisis que estalló el 9 de marzo» con la celebración de las elecciones primarias. Según Orellana, los titulares de los organismos electorales «no tienen la madurez suficiente para asumir la alta responsabilidad de conducir los comicios generales» programados para noviembre próximo.
«Lo que hemos visto es un acto de infantes jugando con los intereses más sagrados del país y poniéndolos en riesgo. Estamos hablando del voto, lo más importante de una democracia que garantiza la alternancia en el poder, y eso evidentemente lo han tratado tan torpemente e irresponsablemente todos los organismos involucrados», analizó Orellana.
El exministro identificó como raíz del problema el hecho de que «en el órgano electoral lo que hay son representantes de partidos y no servidores públicos de la nación», sugiriendo un conflicto estructural en la conformación de estas entidades.
Respecto a la actuación del general Roosevelt Hernández, Orellana la calificó como «grave y preocupante», señalando que como jefe del Estado Mayor Conjunto «debe asumir una actitud más serena y tranquila». «No debió haber hecho esas declaraciones así tan agresivas y desafiantes, debió plantear por escrito sus quejas», puntualizó.
Orellana advirtió además que el comportamiento del jefe castrense representa «un mal ejemplo para sus subalternos y les da vía libre para insubordinarse». «Ese caballero se enredó en la trampa que le tendieron los políticos y está exponiendo a las Fuerzas Armadas», indicó.
El incidente al que hace referencia ocurrió cuando el general Roosevelt Hernández llegó visiblemente furioso a las instalaciones del CNE e increpó a gritos a la consejera Cossette López por una publicación en la red social X del 19 de marzo, donde denunciaba una supuesta conspiración del cuerpo castrense, un expresidente y una candidata para alterar los informes de las elecciones primarias. Este altercado ha generado un amplio rechazo por parte de diversos sectores de la sociedad hondureña.
La tensión entre el CNE y las Fuerzas Armadas aumenta la preocupación sobre la estabilidad institucional del país de cara a las elecciones generales programadas para noviembre.