El Departamento de Estado de Estados Unidos publicó este 19 de febrero un histórico aviso en el que designa oficialmente a siete organizaciones criminales latinoamericanas como Organizaciones Terroristas Extranjeras (FTO, por sus siglas en inglés). La medida, que entrará en vigor tras su publicación en el Registro Federal programada para mañana, representa un cambio significativo en la estrategia estadounidense contra el crimen organizado transnacional.
Según el documento oficial 12672, la designación afecta a Tren de Aragua (también conocido como Aragua Train), Mara Salvatrucha (MS-13), Cartel de Sinaloa, Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), Carteles Unidos, Cartel del Noreste (CDN) y Cartel del Golfo (CDG), así como La Nueva Familia Michoacana (LNFM).
La decisión fue tomada tras una exhaustiva revisión de registros administrativos y en consulta con el Fiscal General y el Secretario del Tesoro. Las autoridades determinaron que existe «una base factual suficiente» para concluir que estas organizaciones cumplen con los criterios establecidos en la sección 219 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA).
El documento detalla los diversos nombres y alias bajo los que operan estas organizaciones. Por ejemplo, el Cartel de Sinaloa también es conocido como Sinaloa Cartel, Mexican Federation y Guadalajara Cartel; mientras que los Carteles Unidos operan bajo denominaciones como United Cartels, Tepalcatepec Cartel, The Grandfather Cartel y Cartel de Los Reyes.
Esta clasificación como organizaciones terroristas extranjeras implica importantes consecuencias legales y financieras para estas agrupaciones y sus asociados. Bajo la legislación estadounidense, esta designación permite congelar activos, imponer sanciones económicas más severas y aplicar cargos criminales adicionales a quienes brinden apoyo material a estas organizaciones.
El aviso oficial, identificado con el código 710-AD, estará disponible para consulta pública en los portales federalregister.gov y govinfo.gov a partir del 20 de febrero de 2025, fecha en que las designaciones entrarán formalmente en vigor.
Esta medida marca un precedente en la lucha contra el narcotráfico y la violencia organizada en la región, elevando a estas organizaciones criminales al mismo estatus legal que grupos como ISIS o Al-Qaeda en el marco jurídico estadounidense.