Helmut Marko, asesor y uno de los personajes más cercanos a Max Verstappen, está siendo investigado por la escudería a raíz de las filtraciones a los medios.
Por Infobae
La investigación interna sobre Christian Horner parece haber sido simplemente la punta de un ovillo mucho más complejo que pone sobre la mesa la posibilidad de implosionar la dinámica de una de las escuderías más exitosas de la Fórmula 1 en las últimas décadas. La filtración de mensajes de WhatsApp que continuó tras la “absolución” del jefe de Red Bull se completó con las explosivas declaraciones de Jos Verstappen, padre de Max, contra el acusado. En plena guerra entre dos de las piezas claves de la estructura, una información que surgió en las últimas horas promete sumar una oleada más de escándalos en el team del energizante.
Helmut Marko, uno de los asesores más importantes de Red Bull, con injerencia en las decisiones casi al nivel de los directivos más encumbrados, está siendo objeto de una investigación interna por parte de la escudería “en relación con varias filtraciones en los medios que han tenido lugar desde que se supo que Horner estaba siendo investigado”, aseguró el portal especializado MotorSport.
“La posibilidad teórica existe, lo quieras o no. Es un tema muy complejo”, fueron las palabras de Marko que replicó el medio especializado Racingnews365, que asegura que la investigación está directamente emparentada a las noticias sobre Horner que tuvieron actualización casi diaria en algunos medios del planeta.
¿El detalle? Marko es parte del estrecho círculo íntimo de Max Verstappen, quien en las últimas horas salió a respaldar a su padre en la batalla contra Horner. Inclusive se filtró a la prensa que el piloto de 26 años, que parece tener el camino allanado para sumar su cuarto título consecutivo, podría marcharse automáticamente de Red Bull si Helmut es despedido o se va de la empresa.
El hecho que desencadenó todos estos nudos fue la denuncia de una empleada a Horner, alegando teóricos “comportamientos inapropiados”. Horas antes del inicio de la temporada de Fórmula 1, Red Bull Racing decidió absolver al hombre que lidera el equipo desde hace casi dos décadas. Y todo parecía empezar a apaciguarse…
Sin embargo, en plena competencia llegó un mail anónimo a múltiples personalidades de relevancia de la Máxima con los teóricos chats entre Horner y la empleada. La tensión creció, Jos Verstappen lo atacó abiertamente y hasta se filtró un video de ambos discutiendo acaloradamente, al mismo tiempo que se hablaba de rumores sobre romances ocultos o complots.
Mientras aseguran que la empleada denunciante fue corrida de su cargo, Horner debió responder el acecho de la prensa en el GP de Arabia Saudita: “Mire, obviamente estoy al tanto de los comentarios que se hicieron. Hubo un debate después de la carrera y creo que todo el mundo se centra en el futuro. El enfoque del equipo está principalmente en defender estos títulos mundiales por los que hemos luchado tan duro. Las discusiones tuvieron lugar después de la carrera en Baréin”, respondió Horner cuando le preguntaron por las feroces declaraciones de Jos Verstappen, según replicó The Telegraph.
“Obviamente, el padre de Max ha jugado un papel clave en su carrera y en llevarlo a la Fórmula 1. Pero obviamente, Jos es su propio hombre. Max también es su propio hombre. Y lo hemos visto pasar de ser un adolescente cuando se unió a nosotros a ser ahora un hombre joven que ha logrado lo que tiene. Así que no me corresponde comentar sobre las relaciones entre padres y conductores. Todos son únicos entre los diferentes individuos”, analizó. “Hablé con Jos después del Gran Premio y obviamente le felicité por la actuación de su hijo. Y creo que es en el interés colectivo de todos que hayamos acordado seguir adelante, centrarnos en el futuro. Y ambos tenemos un gran interés en que su hijo obtenga lo mejor y en proporcionarle los mejores coches y sacar lo mejor de él”.
El jefe del equipo, que recibió el respaldo de su esposa a nivel público en el GP de Baréin, fue el eje de la conferencia de prensa compartida con otros líderes de escuderías como Bruno Famin (Alpine), Mike Krack (Aston Martin) y James Vowles (Williams). Insistió con que no iba a “ventilar” los detalles de las discusiones, pero sí confirmó que “inevitablemente” han mantenido charlas entre las distintas partes y hasta se animó a decir que Max cumplirá su contrato hasta 2028: “Estoy seguro que lo hará”.
El detalle es que en esa conferencia, el diario británico The Telegraph refleja que Horner dejó una frase que hoy bien podría interpretarse en distintas direcciones ante esta nueva investigación que recae sobre Marko. “La única razón por la que esto ha ganado tanta atención, obviamente, es por la filtración y la tensión que se ha dibujado en los medios de comunicación, que ha sido muy difícil en muchos aspectos, y en particular para mi familia, porque todo se ha centrado mucho en una dirección. Y, por supuesto, lo que ha ocurrido después es que otros han intentado aprovecharse de ello. Desafortunadamente, la Fórmula 1 es un negocio competitivo, y ha habido, obviamente, elementos que han buscado beneficiarse de ello, y ese es quizás el lado no tan bonito de nuestra industria”.
Y cuando le plantearon si creía que había una campaña en su contra, advirtió: “Mira, hemos tenido un éxito tremendo. Hemos ganado mucho y estamos muy unidos como equipo, y en eso nos centramos de cara al futuro. Ha habido, obviamente, una gran cantidad de cobertura en torno a esta situación, pero creo que realmente es el momento de seguir adelante”.
“Ya sabes, ha habido una cosa tras otra. Y creo que, ya sabes, como digo, ha habido un montón de filtraciones en torno a esto, lo que es un asunto privado y confidencial entre los empleados y la empresa. Desafortunadamente a través de eso, a través de esa filtración ha cosechado una gran cantidad de cobertura”, insistió.