Tegucigalpa – El experto en temas energéticos de la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ), Kevin Rodríguez, realizó un análisis comparativo entre los modelos eléctricos de Honduras y El Salvador, destacando cómo las diferentes políticas adoptadas han llevado a resultados dispares en ambos países.
Según Rodríguez, Honduras estuvo cerca de implementar un modelo similar al salvadoreño gracias a la Ley General de la Industria Eléctrica, que hubiera permitido a los usuarios elegir su proveedor de energía.
Sin embargo, la aprobación de la Ley de Energía en 2022 marcó un retroceso hacia un modelo estatista que, en su opinión, ha demostrado ser ineficiente en países como Cuba y Venezuela.
El contraste entre ambos países es notable en varios aspectos clave:
- El Salvador mantiene pérdidas eléctricas del 14%, mientras Honduras registra un 36%, el más alto en Centroamérica, generando pérdidas de aproximadamente 40 millones de lempiras diarios.
- El costo promedio de energía en El Salvador para 2024 es de $0.22/kWh, inferior al $0.25/kWh en Honduras.
- El Salvador cuenta con ocho empresas distribuidoras desde la liberalización de su mercado en 1998, mientras Honduras mantiene el monopolio de la ENEE.
El experto destacó que el modelo salvadoreño de subsidios es más eficiente, ya que el gobierno central asume el costo y lo traslada directamente a las distribuidoras privadas.
En contraste, Honduras obtiene el 40% del dinero para su subsidio de «energía gratis» mediante cobros a la industria, comercio y ciertos sectores residenciales, lo que encarece el costo del kWh para el sector productivo y genera inflación.
Rodríguez también desmintió la narrativa sobre los apagones de los años 90 en Honduras, señalando que no fueron causados por el vaciamiento de El Cajón, como sugieren algunos videos promovidos por la Secretaría de Planificación Estratégica.
