Expertos de la ONU en derechos humanos condenaron hoy el empleo de prácticas que deshumanizan a los inmigrantes y solicitantes de asilo en los controles fronterizos de Grecia.
También consideraron que se está violando el principio de no devolución forzada, así como el derecho a la vida de quienes llegan a este país por vías irregulares.
Los expertos solicitaron recientemente al Gobierno griego información detallada sobre el caso de doce solicitantes de asilo de Somalia, Eritrea y Etiopía que, tras llegar al país el 10 de abril, fueron supuestamente detenidos por hombres enmascarados, despojados de sus pertenencias y llevados por la fuerza al puerto de Mitilene, en la isla griega de Lesbos.
“La violencia, que fue capturada en vídeo -verificada y reportada por los medios de comunicación- expuso la exclusión racista y la crueldad de las prácticas de protección fronteriza”, dijeron.
Por ésta y otras denuncias, los expertos condenaron la ausencia de responsabilidades y pidieron a las autoridades griegas que garanticen investigaciones transparentes e imparciales sobre éste u otros sucesos similares.
También denunciaron la práctica “deliberada y coordinada” de devolución forzosa de los migrantes y recordaron que instancias de derechos humanos de la ONU han pedido a los Estados que no realicen expulsiones colectivas.
Entre los firmantes de esta declaración se encuentran los relatores sobre los derechos humanos de los migrantes, Felipe González Morales; sobre ejecuciones extrajudiciales y sumarias, Morris Tidball-Binz; y los miembros del grupo de trabajo sobre las personas de ascendencia africana.