Tegucigalpa – La ciudad se encuentra nuevamente consternada por la muerte de un joven de 17 años a causa del dengue grave en el Hospital Escuela. El portavoz del hospital, Said Norales, informó sobre este lamentable suceso que ocurrió el pasado lunes, después de que el adolescente estuviera ingresado durante 11 horas.
El menor fue trasladado desde el Hospital Santa Teresa de Comayagua, en la zona central de Honduras, hacia Tegucigalpa el domingo por la tarde. Presentaba un cuadro grave de fiebre y su salud estaba deteriorada, por lo que su vida se apagó rápidamente.
Esta trágica noticia se suma a la reciente muerte de otro joven de 16 años por dengue en el centro asistencial de Comayagua. El dengue sigue cobrando vidas y causando estragos en la población hondureña, especialmente en los más jóvenes.
El portavoz del Hospital Escuela, Said Norales, destacó que este fallecimiento representa el primer deceso por dengue en el hospital en lo que va del año 2023. Sin embargo, reveló que durante este año se han atendido a 175 pacientes, de los cuales el 95% son niños.
La situación es preocupante, ya que según datos de la Regional Metropolitana de Salud, Honduras ha registrado más de dos mil casos de dengue hasta junio. El médico anestesiólogo Carlos Umaña ha advertido sobre el riesgo de una nueva epidemia de dengue con el inicio de las lluvias en el país.
Umaña hizo un llamado a la Secretaría de Salud (Sesal) para que asuma un rol protagónico en la termonebulización y abatización de los criaderos de mosquitos. Si no se toma en serio esta situación, advirtió que Honduras se enfrentará a un aumento significativo de casos de dengue.
Es fundamental que las autoridades de salud tomen medidas urgentes y efectivas para prevenir la propagación del dengue y proteger a la población. La termonebulización y la eliminación de criaderos de mosquitos deben ser prioridades en la lucha contra esta enfermedad.
La comunidad también juega un papel importante en la prevención del dengue. Es fundamental eliminar los recipientes que puedan acumular agua estancada, utilizar repelente, ropa protectora y mantener limpios los patios y jardines.
Esperamos que este trágico suceso sirva como un llamado de atención para que se intensifiquen las acciones contra el dengue en Honduras y se eviten más pérdidas de vidas humanas. La salud de la población debe ser una prioridad para garantizar un futuro libre de esta enfermedad.
