Nueva York – La Fiscalía de Estados Unidos ha presentado cargos por narcotráfico contra David Elías Campbell, conocido como “El Viejo Dan”, junto con tres líderes más de la organización criminal MS-13. Este anuncio fue realizado por Damian Williams, fiscal del Distrito Sur de Nueva York, y Merrick B. Garland, el Fiscal General de los Estados Unidos.
David Campbell fue arrestado y extraditado desde Honduras, siendo presentado ante la jueza Sarah Netburn en la corte federal de Manhattan. Junto a él, también se encuentran acusados Yulan Andony Archaga, alias “El Porkys”, líder máximo de la MS-13 en Honduras, así como Juan Carlos Portillo Santos, Victor Eduardo Morales Zelaya y Jorge Alberto Velásquez Paz, señalados por diversos delitos relacionados con estafa, tráfico de estupefacientes y delitos con armas de fuego.
La acusación incluye a Campbell y “El Porkys” por cargos previamente presentados en 2021 en la corte federal de Manhattan, mientras que “El Porkys” figura en la lista de fugitivos más buscados del FBI y la DEA, con una recompensa de $5 millones ofrecida por los Estados Unidos.
Según el comunicado oficial de la corte de Nueva York, dos de los acusados están detenidos en Honduras, mientras que uno sigue prófugo. Damian Williams enfatizó la peligrosidad de la MS-13, calificándola como una de las organizaciones criminales más peligrosas del mundo.
El Fiscal General, Merrick B. Garland, destacó el compromiso del Departamento de Justicia en responsabilizar a aquellos que causan violencia y trafican drogas mortales. Por su parte, la administradora de la DEA, Anne Milgram, enfatizó el compromiso de la agencia en perseguir a los narcotraficantes y salvar vidas.
La MS-13 es conocida por su violencia, incluyendo asesinatos, secuestros, asaltos y extorsión, así como por su participación en el tráfico de drogas a gran escala en Centroamérica y los Estados Unidos. “El Porkys” es identificado como el líder de mayor rango de la MS-13 en Honduras, encargado de coordinar operaciones de narcotráfico y ordenar actos de violencia, incluyendo asesinatos.
De ser declarados culpables, los acusados enfrentan una pena máxima de cadena perpetua y una pena mínima obligatoria de 40 años de prisión.
