Tegucigalpa – La hidroeléctrica Patuca III, ubicada en el departamento de Olancho, se encuentra sin operar desde hace 36 horas y se sospecha de un posible sabotaje, lo que podría llevar a fuertes racionamientos de energía en la zona en las próximas horas.
Ante esta situación, Alexander Godoy, secretario laboral del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (STENEE), expresó su preocupación y destacó que se están llevando a cabo investigaciones exhaustivas.
“Sí, nos preocupa esto y se están haciendo las investigaciones rigurosas. Consideramos que hay algún sabotaje porque es una planta moderna”, declaró.
La central hidroeléctrica Patuca III comenzó a operar hace dos años y, al ser relativamente nueva, resulta desconcertante que esté presentando fallas. «Tenemos suficiente nivel de embalse y capacidad de generación, pero hay una falla mecánica que impide inyectar esa energía al sistema, que tanto necesita nuestro país», añadió Godoy.
La planta es de gran importancia para el país y su exclusión del sistema interconectado genera preocupación. Según los informes, Olancho necesita al menos de 18 a 20 megavatios para poder conectar la línea de transmisión de 230 kV, desde Patuca hasta la subestación de Juticalpa.
Ante la situación, Godoy se cuestionó a quién podrían beneficiar estos eventos y señaló que las autoridades de la empresa eléctrica estatal están llevando a cabo las investigaciones correspondientes.
El dirigente lamentó que algo así haya sucedido con la planta, especialmente considerando que aún cuenta con un año de garantía. «Las investigaciones deben ser rigurosas», recalcó.
Godoy enfatizó la gravedad de la situación, ya que en el contexto actual del país, con frecuentes apagones, no se pueden permitir que una planta tan importante esté fuera del sistema interconectado nacional.
«Esta problemática no huele bien y representa un peligro. En estas circunstancias que atraviesa el país, no podemos permitirnos el lujo de tener la planta fuera del sistema interconectado», puntualizó.