Tegucigalpa – En un nuevo capítulo del caso que involucra al diputado de Libre, Jorge Cálix, la exfuncionaria de Copeco, Higinia Chévez, ha desautorizado a la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, para que deje de utilizar su nombre en este complicado asunto de violencia doméstica.
A través de un video, Chévez expresó su cansancio y dejó claro que fue amenazada para hacer y decir cosas que no son ciertas desde un principio.
En sus declaraciones, la exfuncionaria enfatizó que todos los videos y fotos publicados por la viceministra son totalmente falsos. Además, señaló la intervención de hackers que, según ella, son financiados por el Congreso y que desde un inicio trataron de manipular sus declaraciones.
Chévez también negó haber otorgado algún poder a la abogada Angie Villanueva y desmintió cualquier documento firmado en ese sentido. Afirmó que la Policía fue enviada a su casa por Julissa Villanueva, y durante la intervención de altos funcionarios del Gobierno, cortaron la energía eléctrica e intentaron instalar un rastreador en su teléfono.
Por su parte, Julissa Villanueva justificó las acciones y afirmó que Chévez está sufriendo el síndrome de la mujer maltratada o de Estocolmo. La viceministra sostuvo que Higinia conoce la verdad y la buscó en busca de apoyo.
Aseguró que Jorge Cálix agredió a la joven y que existe un encubrimiento claro para un funcionario de alto poder, algo que busca demostrar en medio de esta controversia.