Tegucigalpa – La Comisión del Ferrocarril Interoceánico de Honduras ha dado pasos significativos hacia la materialización de un proyecto que ha permanecido en el imaginario nacional por más de 170 años. Héctor Zelaya, presidente de la Comisión, anunció avances sustanciales en la iniciativa que promete transformar la infraestructura y el desarrollo económico del país centroamericano.
El proyecto contempla una primera fase crucial que incluye la modernización de puertos, ampliación de carreteras y el desarrollo del Canal Seco. La Comisión ya ha iniciado contactos internacionales, realizando su primera visita a Estados Unidos para la selección de socios estratégicos y esquemas de financiamiento.
Paralelamente, el país ha asegurado un importante respaldo del Banco Mundial, que aprobó un financiamiento de 187 millones de dólares para la construcción de un tramo de 46 kilómetros que conectará las carreteras CA-4 y CA-13, desde Macuelizo hasta Corinto.
Esta obra complementaria fortalecerá la red de conectividad nacional necesaria para el proyecto ferroviario.
«La iniciativa representa un marco legal innovador que equilibra los intereses del sector privado con los derechos laborales, mientras promueve la inversión y el desarrollo comercial», destacó Zelaya durante su intervención.
El proyecto busca posicionar a Honduras como un centro neurálgico del comercio regional, conectando ambas costas del país.
La administración actual enfatiza que este proyecto marca una diferencia significativa respecto a intentos anteriores, señalando que se están sentando las bases para una transformación integral de la infraestructura nacional que promete generar nuevas oportunidades económicas para la población hondureña.