Tegucigalpa – La decisión del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) de excluir al vicepresidente del Congreso Nacional de Honduras, Hugo Noé Pino, de la terna de candidatos para la presidencia ha generado una ola de reacciones por parte del gobierno hondureño.
La ministra de Finanzas, Rixi Moncada, expresó su descontento en las redes sociales, afirmando que la evaluación de Pino fue injusta y que el economista hondureño era indudablemente el mejor calificado para el puesto.
En su declaración en línea, la ministra mencionó que la exclusión de Noé Pino se debió a los votos de países extrarregionales, señalando específicamente a Taiwán, con el cual Honduras recientemente rompió relaciones para establecerlas con China.
Según Moncada, Pino obtuvo tres votos de los cinco países fundadores del BCIE en Centroamérica, que incluyeron a Nicaragua, El Salvador y Honduras, lo que, según ella, resalta la calificación excepcional del candidato.
Esta controversia ha destacado la importancia de la selección de un nuevo presidente ejecutivo para el BCIE y ha planteado cuestionamientos sobre el proceso de evaluación llevado a cabo por la entidad financiera regional.
Mientras tanto, la terna seleccionada por el directorio del BCIE, compuesta por los costarricenses Ana Guissella Sánchez Maroto y Bernardo José Alfaro Araya, junto con el guatemalteco Jaime Roberto Díaz Palacios, se encuentra en consideración por parte de la Asamblea de Gobernadores, la cual tiene la responsabilidad de tomar la decisión final de elección.
La situación ha generado un ambiente de incertidumbre en el ámbito político y económico de Honduras, con la posibilidad de una protesta oficial por parte del gobierno durante la Asamblea del 17 de Noviembre.
