Tegucigalpa – El director del Hospital San Felipe, Carlos Murillo, hizo un dramático llamado este domingo ante las tomas de los colectivos del Partido Libertad y Refundación (Libre), que están impidiendo la atención a 450 pacientes hospitalizados en ese emblemático nosocomio de la capital.
El conflicto con el sindicato surgió cuando se decidió movilizar a un empleado de nombre Jorge Rivera del área de personal debido a procesos dudosos ejecutados por él, lo que provocó que Elvin Canales saliera en su defensa y tomara la institución con los colectivos de Libre.
Además, Ivis Zelaya, también miembro del sindicato, se molestó porque se trasladó a una persona de caja al área de oftalmología al considerar que no era necesaria en la administración.
“Imagínense que tenemos 450 camas de pacientes hospitalizados y no podemos llevar los suministros, ni nada, porque tienen parados todos los procesos administrativos. Tienen secuestrado el Hospital San Felipe y el hecho que sigamos accediendo a sus demandas, entonces es el motivo principal por el cual lo soltarían”, lamentó el director.
El doctor Murillo pidió que «esto no puede seguir pasando» y rogó a las autoridades de más alto nivel que evalúen el tipo de dirigentes que tienen y que están utilizando el hambre de sus seguidores para causar este caos.
Los colectivos de Libre, liderados por Melvin Ceballos, mantienen una toma en el mencionado nosocomio desde hace una semana. Se han interpuesto denuncias ante la Fiscalía, pero las autoridades aún no han procedido con los desalojos.
“El día de mañana (lunes) nosotros amanecemos sin nada de reactivos, ya esto es del conocimiento del nivel central, con el jefe de personal de administración central, estamos buscando suministros a través de ellos, en vista que nos tienen paralizada nuestra administración. Estamos buscando dónde reunirnos, en otro lugar y ni siquiera no dejan reunirnos en el hospital”, se quejó el director del San Felipe.
Detalló que a los 450 pacientes hospitalizados, la mayoría de ellos oncológicos, no se les puede realizar transfusiones, hemogramas y otras pruebas debido a la obstaculización de la administración del centro asistencial.
Además, mencionó que un proceso de adquisición de equipos quirúrgicos por valor de 12 millones de lempiras está detenido por las tomas. “Son dos mil pacientes diarios los que se ven en consulta externa en el Hospital San Felipe, les digo a los colectivos que si quieren protestar que lo hagan en las calles, pero no obstaculicen el medicamento que ocupan los pacientes”, insistió.