Tegucigalpa – La incertidumbre prevalece entre los productores mientras se acerca el ciclo de postrera, una etapa crucial para la agricultura en Honduras, según declaró el presidente de la Asociación de Productores de Granos Básicos (Prograno), Juan Valladares.
La variabilidad climática, agravada por el cambio climático, ha generado preocupaciones significativas. Valladares expresó su preocupación acerca de la irregularidad de las condiciones de precipitación en todo el país, lo que dificulta la planificación de siembras.
A pesar de que se han registrado lluvias en el occidente de Honduras, esta área no es una zona productora de granos básicos. En cambio, regiones como Olancho y El Paraíso, que son vitales para la producción de granos, están experimentando una sequía irregular.
Esta incertidumbre climática está afectando la toma de decisiones de los agricultores, quienes dudan en comprometerse con la siembra de postrera. La producción de maíz disminuye durante esta temporada, pero el cultivo de frijoles alcanza su punto máximo.
A pesar de las adversidades climáticas, Honduras continúa importando una cantidad significativa de granos básicos, lo que representa una pérdida de divisas que podrían destinarse a otros fines.
Esta situación es un obstáculo para estimular la producción nacional de granos básicos y la rentabilidad en este sector ha disminuido considerablemente, lo que desanima a los agricultores a invertir en el campo.
La incertidumbre en la agricultura es un problema que necesita ser abordado de manera efectiva para garantizar la seguridad alimentaria en Honduras y promover la producción nacional de granos básicos.