Tegucigalpa – El Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH) ha lanzado una advertencia contundente este miércoles, señalando que de no tomarse medidas preventivas a tiempo, hacia finales del primer trimestre del año 2024, la institucionalidad hondureña corre el riesgo de colapsar ante el creciente flujo irregular de migrantes que atraviesan el territorio nacional.
William Alvarado, delegado Departamental del CONADEH en El Paraíso, recordó que durante el punto más álgido, cuando entre 4,000 y 5,000 personas migrantes transitaban diariamente por Honduras, las instituciones gubernamentales se vieron desbordadas.
Ante la posibilidad de un aumento en el flujo migratorio, similar al registrado en el segundo trimestre del año 2023, Alvarado subrayó la necesidad de activar los grupos de respuesta de las instituciones nacionales, destacando la importancia de las mesas SINAGER departamentales lideradas por el Instituto Nacional de Migraciones y la Comisión Permanente de Contingencias (COPECO).
Además, hizo hincapié en la urgencia de acelerar la construcción de la Casa para el Migrante Irregular, que actualmente no está habilitada, y señaló la creciente presencia de personas que pernoctan en las plazas públicas como un indicio preocupante.
El CONADEH expresa su preocupación por el aumento proyectado del número de migrantes irregulares para finales del primer trimestre de 2024, lo que podría volver a colapsar tanto los albergues como la asistencia humanitaria.
El tránsito de migrantes irregulares ha aumentado drásticamente, con 32,970 personas procedentes de casi un centenar de países que han transitado por Honduras entre el 1 y el 28 de enero de 2024. Entre ellos, se cuentan 13,267 venezolanos, 4,771 cubanos, 2,913 haitianos y 1,815 ecuatorianos.
Según registros, 3,595 niñas, 4,556 niños, 8,174 mujeres y 16,645 hombres han transitado por Honduras durante este periodo. El 95.58% de ellos ingresó por la zona oriental del país.
Comparativamente, durante los primeros 28 días de 2022 se registraron 1,638 migrantes irregulares en Honduras, cifra que aumentó a 16,648 en 2023 y 32,970 en 2024.
Los abusos contra los migrantes continúan en 2024, con denuncias sobre altos costos de transporte y venta de permisos falsificados. Recientemente, 43 nicaragüenses fueron detenidos por falsificación de documentos públicos, algunos con medidas sustitutivas y otros bajo detención.
Alvarado reconoció que el flujo migratorio ha impactado positivamente en las economías municipales, pero subrayó que se han tomado decisiones perjudiciales para los migrantes. En Trojes, por ejemplo, se cobra a las unidades de transporte que llevan migrantes, afectando principalmente a los más vulnerables.
Desde el 1 de enero de 2021 hasta el 28 de enero de 2024, se registraron 784,461 migrantes irregulares en Honduras, con la mayoría procedentes de Venezuela, Cuba, Haití, Ecuador y Colombia.
Alvarado advirtió que hay un número indeterminado de personas que no se registran biometricamente, lo que sugiere que el número real de migrantes que atraviesan Honduras es aún mayor.
