Tegucigalpa – La viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, dejó entrever su renuncia como presidenta de la Comisión Interventora del Sistema Penitenciario de Honduras, después de afirmar que el crimen no la derrotó y que seguirá trabajando en otros aspectos del gobierno.
Después de 70 días en el cargo de interventora del sistema penitenciario, durante los cuales ocurrieron varios incidentes violentos en cárceles hondureñas y culminaron con la masacre de 46 mujeres en la cárcel de Támara.
Villanueva expresó: “El crimen nos ha golpeado duro en este momento por las mujeres asesinadas, Honduras está de luto, pero eso no significa que doblegaron a la doctora Villanueva ni tampoco al gobierno de la presidenta, al contrario la presidenta ha tomado sus decisiones, la doctora Villanueva no está acabada como algunos piensan”.
Después de participar en una reunión en Casa de Gobierno, la exinterventora criticó que el crimen organizado haya sacrificado a 46 reclusas en Támara con el objetivo de “demostrar un poder siniestro y malévolo para hacerle daño y sembrar terrorismo en el pueblo hondureño”.
Cuando se le preguntó sobre su renuncia a la Comisión Interventora, Villanueva respondió: “Ya mirarán ustedes las decisiones de una presidenta que también está dolida como el pueblo hondureño. Sentimos un pesar enorme porque eso no debió haber ocurrido”.
Reveló que existen amenazas por parte de grupos criminales de seguir causando daño en el país, pero los desafió diciendo: “No van a ganar”.
Además, enfatizó: “A mí no me ha doblegado el crimen porque continuo y voy a seguir trabajando en estos menesteres, en estas indicaciones especiales que hoy me ha dado la presidenta”.
Julissa Villanueva afirmó que no se siente frustrada y que seguirá trabajando en temas de seguridad.
Cuando se le preguntó si recibió todo el apoyo necesario para desempeñar su cargo como titular de la Comisión Interventora del Sistema Penitenciario, respondió a los periodistas que dejaran tres puntos suspensivos.
