(Photo by Raul ARBOLEDA / AFP).
Conmoción ha causado en Colombia la detención de alias “Camila”, una mujer que mantenía una gran red de prostitución en el país y que llegó a evadir a la justicia durante años.
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La mujer es una de las diez personas que fueron capturadas por investigadores de la Dirección de Protección y Servicios Especiales de la Policía Nacional; y es señalada de falsificar papeles venezolanos falsos con el proposito de comercializar el cuerpo de otras personas, la mayoría de ellas menores de edad.
Los métodos horrendos de Camila han conmovido a los ciudadanos que hacen vida en las ciudades de Bogotá y Cúcuta (Norte de Santander), quienes sabían de los movimientos de la criminal, quien junto a otras nueve personas mantenían este negocio ilícito.
Según ha relatado el diario Semana en un reciente trabajo periodístico, las jovenes fueron obligadas a realizar trabajos sexuales en contra de su voluntad y debían pagar hospedaje y comida.
Se desconoce el número de menores envueltas en el entramado.
Otro de los fuertes hallazgos de la investigación, que duró al menos 120 días de seguimiento continuo, era los entrenamientos con la brujería, con el fin de que con los rituales esotéricos sus clientes se apegaran al placer que les brindaban.
Este entramado también dio con la captura de alias Jeison, presuntamente encargado de hacer viajes a distintas zonas del país con el fin de captar menores de edad, en su mayoría adolescentes vulnerables y migrantes, para explotarlas en los negocios de Camila.
Los horrendos testimonios que sigue recogiendo la polícia colombiana, además de Fiscalía General de la Nación y la ONG Operation Underground Railroad cada vez son más fuertes y se está a la espera de más detalles.
Con información de Semana.
