Florida. – El golfista Tiger Woods pasa la cuarentena en su casa, como la mayoría de las personas en todo el mundo. Pero no es cualquier vivienda, sino una mansión en Júpiter Island, una de las zonas más exclusivas de Florida, que está tasada en aproximadamente 54 millones de dólares.
En ella está junto a Erica Herman (su actual pareja) y los hijos de su primer matrimonio: Sam Alexis y Charlie Axel.
Woods se casó en 2004 con la modelo sueca Elin Maria Pernilla Nordegren, quien era la niñera de Jesper Parnevik, un golfista sueco que los presentó.
La ceremonia secreta se realizó en Barbados con unos 200 invitados. Herman, de 33 años, es considerada como «la salvadora de Tiger».
Están en pareja desde hace tres años y la novia del mejor golfista de todos los tiempos trabajaba de mánager en el restaurante que abrió el deportista en Florida: «The Woods Júpiter».
La mansión cuenta con 900 metros cuadrados divididos en dos secciones, para lograr aún más intimidad dentro del mismo terreno. Entre los muchos lujos de las instalaciones hay desde un gimnasio completamente equipado a una sala de cine, teatro, sala de juegos, bodega e incluso un espacio de oxigenoterapia.
El multicampeón de golf tiene su cancha privada, como para despuntar el vicio y además practicar de cara a la lejana reanudación del deporte mundial. Tiene cuatro hoyos y es parte de su propiedad, por lo que únicamente camina unos metros para llegar sin tener que abandonar su terreno.
Este año no podrá repetir el título del Masters de Augusta, que consiguió por última vez el año pasado tras 14 temporadas. La pandemia del coronavirus cambió los planes de Woods, que disfruta la cuarentena con su familia en su mansión.
En el interior, cada habitación tiene baño propio y se puede ver una buena distribución de los muebles generando muchísimo espacio para transitar dentro de la vivienda. Sin embargo, lo que más se destaca es la vegetación y la cantidad de verde que posee la mansión.
Además, cuenta con piscina Olímpica, cancha de tenis, pista de atletismo, cancha de básquet y hasta una bodega de vinos. Eso sin contar el muelle privado donde tiene algunos navíos listos para embarcar. También posee un espacio exclusivo para bucear, con todos los equipos que uno se podría imaginar.
El famoso golfista es profesional desde 1996 y acumula más de 800 millones de dólares en ganancias, según la revista Forbes. La mayoría, asegura la revista, proviene de contratos publicitarios y, a pesar de su escándalo por infidelidad donde varias marcas lo abandonaron, el estadounidense siguió facturando.