Tegucigalpa. – Este martes, Xiomara Castro, presidenta de Honduras, dio luz verde a la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional (SRECI) para que realice las gestiones necesarias para establecer lazos diplomáticos entre Tegucigalpa y Beijing.
A través de un comunicado, la mandataria afirmó: “He instruido al canciller Enrique Eduardo Reina, para que gestione la apertura de relaciones oficiales con la República Popular China, como muestra de mi determinación para cumplir el Plan de Gobierno y expandir las fronteras con libertad en el concierto de las naciones del mundo”.
Una diferencia de los otros países centroamericanos, Honduras no mantiene relaciones diplomáticas con la República Popular China, pero sí las ha tenido con Taiwán desde 1941. Es importante destacar que Taiwán es una isla que China considera como parte de su territorio.
A pesar de la presión de Estados Unidos para permanecer en el selecto grupo de países que mantienen relaciones con Taipei, la elección de Castro resultaría en la ruptura de los lazos diplomáticos con Taiwán.
Esta jugada diplomática fue advertida por Xiomara Castro en su plan de gobierno, que dio a conocer en 2021, en el que prometió que “por supuesto buscaremos establecer las más cordiales y amistosas relaciones diplomáticas con la República Popular China y con las comunidades de países asiáticos y africanos que quieran relacionarse con nosotros”.
Antes de su toma de posesión el 27 de enero de 2022, y con la visita programada de la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, se informó que el nuevo gobierno se comprometió con Washington apoyar una Taiwán.
Debido a la negativa de Beijing de mantener relaciones con naciones que tienen vínculos diplomáticos con Taipei, China Popular y Taiwán mantienen un conflicto internacional de mutuo desconocimiento, lo que imposibilita que una nación sepa de la otra aunque reconozca a una de las entidades.
Honduras se une a las naciones centroamericanas de Panamá, Costa Rica, El Salvador y Nicaragua en romper con Taiwán para forjar lazos con Beijing.
Sin embargo, todos menos Honduras lo hicieron después de romper los lazos con Taipei.
Samuel Madrid, delegado de izquierda del partido gobernante Libertad y Refundación (Libre), elogió la elección del presidente Castro y reafirmó que no es necesario romper los lazos con Taiwán para forjar los de la República Popular China.
Dado que nuestra economía depende en gran medida de la economía norteamericana, Madrid dijo: “En lo particular estoy contento y nuestro pueblo también debe estar contento porque no se trata de que vamos a romper relaciones con China Taiwán ni tampoco con Estados Unidos, porque nuestra economía depende mucho de la economía norteamericana”.
Como Honduras tiene “claridad como país e independencia para escoger con quiénes vamos a relacionarnos”.
“Si China nos da salud, tecnología y nos favorece en nuestra economía para sacar avante a nuestro país de la pobreza, es una decisión muy atinada de nuestra presidenta”, argumentó.
Nelson Márquez, representante del Partido Nacional, Aseguró que la decisión de Castro no está “midiendo” los efectos que podría generar en Honduras.
Según Márquez, “Todos los hondureños sentimos que más que una necesidad o un impulso para crear relaciones internacionales que vayan a ser en beneficio del pueblo hondureño, realmente responden más al impulso de una ideología política internacional”.
Continuó diciendo que se ha considerado los posibles efectos sobre los miles de hondureños que residen en Estados Unidos así como las miles de familias que dependen de las remesas de la nación norteamericana.
“No sabemos qué efecto puede tener este tipo de impulsos sobre las posibilidades de que los hondureños en Estados Unidos puedan acceder a un nuevo Estatus de Protección Temporal (TPS, en inglés) o que puedan acceder a un estatus permanente”, puntualizó.
