Timon van Basten exploró 40 países antes de hacer de España su hogar. Desde hace pocos años se dedica a enseñar los lugares más recónditos de la península y, al mismo tiempo, espectaculares para aquellos que desean aventurarse en las entrañas del territorio español.
Por Euronews
Si es aficionado a los viajes, es probable que haya estado en España, quizás explorando Barcelona, Madrid y al menos una isla canaria o balear, pero si alguna vez se ha preguntado en qué parte de España queda todavía relativamente por explorar, tenemos algunas sugerencias. ‘Euronews Travel’ ha hablado con Timon van Basten, guía turístico en España y fundador de Travel Spain 24. Es holandés y ha viajado por todo el mundo.
Es holandés y ha viajado por más de 40 países, pero lleva cinco años afincado en España. Le preguntamos por los mejores rincones de su país de adopción.
Los Pueblos Blancos de Andalucía
“La mayoría de los turistas no pasan de Ronda o Sevilla”, dice Timon a ‘Euronews Travel’, pero “los pueblos blancos que salpican las montañas y colinas son como retroceder en el tiempo”, explica. “Pueblos como Zahara de la Sierra y Grazalema ofrecen sinuosas calles, sabrosas tapas e impresionantes vistas sin aglomeraciones”, prosigue.
Timón recomienda los destinos históricos por sus “casas blancas y pequeños castillos”. Pintando un cuadro evocador, añade, “los olivos crecen alrededor de colinas y acantilados. Es divertido hacer senderismo y relajarse en las plazas de los pueblos. Las flores silvestres florecen en primavera”. Si eso no suena idílico, ¡no sabemos qué lo hará!
Las Médulas en León
“Casi ningún viajero ha oído hablar de él, pero es uno de los lugares más singulares que he conocido”, dice Timón sobre este impresionante paraje del noroeste del país. Tiene una rica historia: hace siglos, los romanos sacaban oro de las minas. Hoy, explica Timon, Las Médulas tienen “un paisaje surrealista de altísimos acantilados rojizos y pilares de piedra que no se parece a ningún otro lugar de España”.
Aunque no es un lugar especialmente conocido, es perfectamente posible aprender más sobre el antiguo patrimonio de la región gracias a las innumerables rutas de senderismo que atraviesan el paisaje y también a un pequeño museo, el Aula Arqueológica. Timón afirma que es un destino para todo el año, con “granjas cercanas que ofrecen degustaciones de vinos locales con los colores del otoño”, algo que resulta una experiencia especialmente conmovedora en esa estación.
La Garrotxa, en Cataluña
Barcelona es una de las ciudades más visitadas de España, por lo que no es de extrañar que este punto neurálgico de Cataluña esté abarrotado y, según cuenta Timon a ‘Euronews’, repleto de “masas de turistas”. Conocida sobre todo por su queso de cabra y la zona volcánica de la Garrotxa, un inmenso parque natural con numerosos conos volcánicos extinguidos, la región tiene mucho más que ofrecer.
Timón sugiere una visita a la “agreste región volcánica salpicada de pueblos medievales”, como Santa Pau, construido en torno a un castillo, o Besalú, con su pintoresco puente románico.
“Santa Pau y Castellfollit de la Roca carecen de grandes atractivos, pero lo compensan con creces con su encanto de pueblo pequeño y su excelente cocina catalana”, afirma.
Es una visita obligada para los amantes de la naturaleza, añade Timon, que explica que el senderismo y el ciclismo son de primera categoría. También dice que no hay que perderse el bosque que “crece en antiguas coladas volcánicas con abedules y robles”.
Si el queso de cabra no es lo suyo, está de suerte: “los embutidos, las verduras asadas y los postres cremosos” son también especialidades regionales.
El Hierro, en Canarias
Aunque es probable que muchos aficionados a la cultura española ya hayan visitado las islas Canarias de Tenerife, Gran Canaria o Lanzarote, no muchos habrán puesto un pie en El Hierro. Es la más meridional y occidental del archipiélago, la más pequeña y la que goza del mejor clima de todas las Canarias.
“La pequeña y remota isla tiene un aire de fin del mundo, con coladas de lava, cráteres volcánicos y exuberantes acantilados que se sumergen en el Atlántico”, dice Timón.
Sugiere alquilar un coche para vivir la experiencia al completo y “explorar a tu ritmo, con pintorescos pueblos, playas solitarias y tranquilas rutas de senderismo por descubrir”.
Se trata de un paisaje realmente único, con su costa de “bosques, acantilados y olas”, mientras que el lago de El Golfo, formado en el cráter de un antiguo volcán y dotado de una tonalidad única gracias a unas algas poco comunes, es un espectáculo magnífico para la vista.
El Hierro también es una buena opción para quienes deseen viajar respetando el medio ambiente. La isla está ampliando constantemente su capacidad para combinar energía hidráulica y eólica, lo que algún día podría permitirle obtener toda su energía de fuentes renovables.
Sierra de Francia en Castilla y León
A medio camino entre Madrid y la frontera portuguesa, se encuentra la Sierra de Francia. Está a tiro de piedra de la ciudad de Salamanca, pero toda la comarca está poco habitada y sus escasos pueblos son conocidos por su gran valor cultural.
“Desde bosques de castaños hasta onduladas colinas verdes salpicadas de pueblos de piedra, esta región rural virgen tiene una belleza sencilla”, dice Timón. “Haga base en la soñolienta La Alberca para vagar por el campo y disfrutar de un guiso casero de migas de pastor sin fanfarrias”.
Es otro destino para los que buscan escapar de la carrera de ratas, con Timón dice, excelente “senderismo y ciclismo [para] explorar el verde campo [que] ofrece sabores de la vida rural”. Junto con la vecina Sierra de Béjar, la Sierra de Francia constituye una Reserva de la Biosfera, lo que significa que las autoridades se aseguran de conciliar la conservación de la biodiversidad de la zona con su uso sostenible.
Además, algunos pueblos de la sierra han sido declarados Conjunto Histórico-Artístico, una iniciativa que pretende preservar, conservar y proteger edificios, objetos y paisajes de especial significación histórica.
