Tegucigalpa – Marcio Sierra, comisionado de la Comisión Nacional de Banca y Seguros (CNBS) de Honduras, criticó este lunes el proceso de evaluación que determina la elegibilidad del país para recibir fondos de la Cuenta del Milenio, señalando que las encuestas realizadas por entidades de la sociedad civil son subjetivas y están sesgadas contra el Gobierno de la presidenta Xiomara de Zelaya.
Sierra indicó que a pesar de que Honduras cumple con el 90% de los 20 indicadores requeridos por la Corporación del Desafío del Milenio (MCA), el país falla en el indicador crucial de corrupción, que tiene un peso del 50% en la evaluación.
“Este indicador se basa en encuestas realizadas por la Asociación para una Sociedad más Justa (ASJ) y el Consejo Nacional Anticorrupción (CNA), a instancias de la Cuenta del Milenio y el Banco Mundial”, explicó Sierra.
El comisionado también señaló que estas encuestas han sido administradas consistentemente a los mismos empresarios desde 2006, lo que, según él, contribuye a una percepción negativa continuada y sesgada hacia las políticas del gobierno actual, especialmente críticas hacia la Ley de Justicia Tributaria y otras reformas.
“Las evaluaciones se hacen de manera que no favorecen al Gobierno, complicando nuestra capacidad para acceder a los fondos que son vitales para el desarrollo del país”, afirmó Sierra.
A su juicio, este enfoque subjetivo ha sido un factor determinante en las recientes exclusiones de Honduras de los beneficios de la Cuenta del Milenio, incluida la más reciente en noviembre de 2023, cuando el país solo aprobó ocho de los indicadores necesarios.
El acceso a estos fondos, que son proporcionados por el gobierno de Estados Unidos, es esencial para financiar proyectos de infraestructura significativos, promover mejoras productivas y reforzar la democracia y el estado de derecho en los países beneficiarios.
Para finalizar, Sierra hizo un llamado urgente para revisar y ajustar el proceso de evaluación con el fin de hacerlo más objetivo y representativo. Propuso la inclusión de un espectro más amplio de la sociedad en las encuestas, buscando equilibrar las perspectivas y mejorar la justicia y la equidad del proceso evaluativo.