Tegucigalpa – El padre Leopoldo Serrano, conocido afectuosamente como Padre Leo, culminó exitosamente una ardua peregrinación de ocho días y 250 kilómetros desde San Pedro Sula hasta Tegucigalpa, llegando finalmente a la colonia San Francisco en Macuelizo, departamento de Santa Bárbara.
Su viaje, marcado por la determinación y el sacrificio, tenía como fin asegurar la reactivación de proyectos vitales para la comunidad de La Reina, devastada por desastres naturales.
La noche de su llegada, la comunidad de Macuelizo celebró con fuegos artificiales, aplausos y abrazos, agradeciendo al Padre Leo por su esfuerzo y compromiso.
A pesar de los desafíos de salud y las adversidades del viaje, el sacerdote compartió noticias esperanzadoras: la reactivación de proyectos pendientes, incluyendo la construcción de viviendas y una escuela para los damnificados.
Durante su travesía, enfrentó numerosos obstáculos, incluida la vigilancia por parte de las autoridades y las dudas iniciales sobre la viabilidad de sus demandas.
Sin embargo, su persistencia fue recompensada cuando, tras llegar a Tegucigalpa, obtuvo el compromiso de la presidenta Xiomara Castro para llevar adelante los proyectos. El Padre Leo subrayó la importancia del apoyo mediático en su lucha, que desempeñó un papel crucial para lograr visibilidad y apoyo a su causa.