Tegucigalpa – El presidente del Comité Central del Partido Nacional (CCPN), Reinaldo Sánchez, propuso este martes que ante la desconfianza entre los partidos políticos, se suscriba un gran pacto por Honduras a fin de aprobar las nuevas leyes electorales y se elijan a las autoridades de los nuevos órganos que regirán los destinos de la democracia hondureña en los años venideros.
Detalló que ese pacto debe recibir el acompañamiento de los actores nacionales, iglesias, la academia, sociedad civil, empresa privada, campesinos, pobladores, médicos, maestros y los medios de comunicación puedan ser testigos del compromiso de la clase política y que el compromiso que se haga sea que del Congreso Nacional nadie se levanta hasta que sea aprobada la última ley y no se haya llevado adelante el procedimiento para elegir a las nuevas autoridades que van a integrar esos nuevos entes que regirán el destino en materia democrática de Honduras.
Sánchez agradeció a las diversas organizaciones tanto en el país como fuera de Honduras que han recibido a los directivos del Partido Nacional en sus sedes para escuchar la posición de esta organización política respecto a las reformas electorales.
Detalló que la cruzada que se inició esa institución política en días anteriores por la democracia hondureña lleva un solo propósito y la población no debe verlo como un tema meramente político porque muchos dirán por qué hablar de temas políticos habiendo tantos problemas, sino que hay que verlo con la seriedad del caso, sobre todo con la advertencia que desde temprano ha hecho el Partido Nacional.
En ese sentido, recalcó que “si no hay las reformas electorales mínimas y necesarias para el próximo proceso electoral, tenemos asegurado un problema más grave que el que sucedió en diciembre de 2017 en el período postelectoral como se le conoce; violencia, saqueos, robos, toma de carreteras, deterioro de la economía y aún más grave, vidas humanas que se perdieron y que no tuvieron porque haberse perdido en los eventos del postelectoral”.
Sobre los culpables, indicó que cada quien tendrá su historia, pero hay algo real, que, si las elecciones hubiesen sido una fiesta cívica, como debieron haber sido y si el pueblo hondureño hubiera tenido ese espacio de credibilidad en el proceso electoral, del reconocimiento del resultado, con las garantías necesarias, Honduras se hubiese ahorrado ese mal momento, pero sobre todo las familias que perdieron sus seres queridos.
“Por eso yo hoy aprovecho esta comparecencia, en nombre de cada cachureco y cachureca alrededor del país, para pedirle a los partidos de oposición política que, por Honduras, por nuestra gente, por nuestra democracia nos sentemos lo más pronto en una mesa a dialogar y construir los consensos necesarios para aprobar estas reformas que son tan necesarias”, apeló.
Añadió que esa es la advertencia que se ha andado haciendo y que por escrito se ha plasmado en cada lugar que se ha andado visitando.
En ese sentido, aprovechó para agradecerle a la Unión Europea que son amigos que han acompañado a Honduras en varias elecciones que también comparten preocupaciones para que sus recomendaciones sean tomados en cuenta y que sobre todo terminen en legislaciones que fortalezcan la democracia hondureña.
Asimismo, agradeció a la Organización de Naciones Unidas, principalmente a su representante residente Igor Garafulic. Recordó que en la sede de la ONU en Nueva York, tuvo la oportunidad de reunirse con el señor Miroslav Jenča, secretario general adjunto de ese organismo mundial a quien también se le advirtió de lo que puede suceder si no se aprueban esas reformas electorales.
Agradeció igualmente a la Asociación por una Sociedad más Justa (ASJ); al embajador de España Guillermo Kirkpatrick; al Instituto Nacional Demócrata (DNI por sus siglas en inglés), a los representantes del grupo de cooperantes conocido como G-16 y a la Organización de Estados Americanos (OEA), hasta donde acudió una comitiva de directivos del Partido Nacional para reunirse con el secretario general del organismo continental, Luis Almagro y con el embajador de Estados Unidas ante la OEA, Carlos Trujillo.
“Yo sé que van a venir críticas porque estamos muy de cerca con Estados Unidos, pero no podemos desconocer que es un país amigo, un país que ha estado con Honduras en las malas y en las buenas”, acotó.
Sánchez afirmó que el Partido Nacional continuará con esa lucha para lo cual ya se ha pedido cita con las iglesias católica y evangélica, igualmente a la academia hondureña, así se hará con la iniciativa privada a través del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), y la Federación de Cámaras de Comercio e Industrias de Honduras (Fedecámaras).
Recalcó que este es un tema que nos debe interesar a todos no sólo por el alto costo económico para Honduras sino en materia de deterioro para la democracia y eso es algo que debe preocuparnos a todos.
Puntualizó que el Partido Nacional no solamente quiere quedarse señalando el problema “y quiero volver a repetir, si la solución la tuviéramos nosotros ya días la hubiésemos aplicado y quiero volver a repetirlo a nombre de los cachurecos y cachurecas no tiene ningún problema el Partido Nacional de Honduras, en que los otros partidos políticos tengan su representante en las distintas instituciones que así se consideren”.
“Y lo digo para que algunos líderes de la oposición se quieran agarrar de este tema de que no queremos que los demás partidos participen, por el contrario, nuestra bancada está lista para que se hagan esas votaciones siempre y cuando se hagan como corresponde, no podemos pretender que se elijan autoridades de instituciones si todavía no tenemos las leyes aprobadas, busquemos un mecanismo de nombramiento que prestigie, que acompañen las otras fuerzas más allá de los políticos y que todos nos sintamos orgullosos de haber tomado las mejores decisiones en torno a la próxima fiesta electoral que ha de vivir Honduras, pero háganoslo bien, hagamos cosas buenas “, recalcó.
Manifestó que el Partido Nacional quiere proponer, porque este es un problema de credibilidad y en privado ha recibido algunas llamadas de lideres de la oposición donde le manifiestan que no le creen a los nacionalistas y ahí hay un problema porque al interior de su partido también no les creen a ellos, y si ya no se creen entre los políticos cómo le van a pedir a Honduras que les crea, sería injusto.
Por esa razón, lo justo es que se le dé certidumbre al país, lo justo es que se le dé certeza a la gente más trabajadora de Honduras que nuestra fiesta cívica electoral de 2021 va a ser eso, una fiesta para elegir para elegir a nuestras autoridades y no un polvorín de guerra donde sufra la población hondureña.
En ese sentido, la propuesta es que se suscriba un gran pacto por la democracia de Honduras donde el acompañamiento de los actores nacionales, iglesias, la academia, sociedad civil, empresa privada, campesinos, pobladores, médicos, maestros y los medios de comunicación puedan ser testigos del compromiso de la clase política y que el compromiso que se haga sea que del Congreso Nacional nadie se levanta hasta que sea aprobada la última ley y no se haya llevado adelante el procedimiento para elegir a las nuevas autoridades que van a integrar esos nuevos entes que regirán el destino en materia democrática de Honduras.
“Si hay voluntad sentémonos, si no hay voluntad, sigan en insurrección, pero Honduras necesita tranquilidad, Honduras necesita paz, Honduras merece que le demos certidumbre y sobre todo que nos aseguremos que respetemos la voluntad de cada hondureño y hondureña”, advirtió.
Reiteró que primero se aprueben las leyes electorales y se elijan las autoridades, pero no se puede elegir a autoridades sin ni siquiera saber qué tipo de perfil van a ocupar las personas que van ostentar esos altos puestos que tienen que ver con la paz y tranquilidad de la democracia y que Honduras siga avanzando.
En la comparecencia, Sánchez fue acompañado por los demás directivos del CCPN.
