Tegucigalpa – En un acontecimiento sin precedentes en el sistema judicial hondureño, la audiencia inicial contra tres generales retirados por el caso Isy Obed Murillo se extendió por más de 30 horas, desatando críticas de expertos legales sobre la conducción del proceso.
Kenneth Madrid, exdirector de justicia de la ASJ, señaló que este procedimiento contradice los estándares establecidos en el Código Penal vigente, que estipula una duración aproximada de 30 minutos para este tipo de audiencias.
Los generales Romeo Vásquez Velásquez, Venancio Cervantes y Carlos Roberto Puerto enfrentan cargos por el asesinato de Murillo, quien se convirtió en mártir de la Resistencia Popular en Honduras.
Tras la extensa sesión judicial, se les dictó auto de formal procesamiento con medidas cautelares que incluyen arresto domiciliario y prohibición de salir del país.
Madrid argumenta que la prolongada duración de la audiencia sugiere una desviación del procedimiento estándar, ya que se intentó convertir una audiencia inicial, que requiere mínima actividad probatoria, en lo que él describe como un «mini juicio».
Esta situación, según el experto, no solo resulta agotadora para las partes involucradas sino que también refleja una politización del caso.
El resultado final de la maratónica sesión fue la imposición de medidas cautelares que incluyen arresto domiciliario bajo la supervisión de sus abogados defensores.
Esta decisión judicial ha intensificado el debate sobre la objetividad y eficiencia del sistema judicial hondureño en casos de alto perfil político.
La resolución contempla además restricciones específicas para los procesados, quienes deberán permanecer bajo vigilancia y tienen expresamente prohibido abandonar el territorio nacional mientras continúa el proceso legal.
