Varias asociaciones proinmigrantes, así como asociaciones que defienden los derechos de los agricultores, presentaron en una corte de Miami una demanda en contra de la nueva ley de inmigración de Florida.
Por Univision
La demanda señala que la nueva ley de inmigración de Florida, que entró en vigor este 1 de julio, le “inflige un daño enorme a la capacidad de las personas para llevar a cabo su vida diaria” y busca prevenir que termine generando “arrestos ilegales, enjuiciamientos y acoso”.
Además, apunta a la sección 10, que es el aparte de la ley que advierte que una persona puede ser acusada de tráfico humano, si entra a Florida en un automóvil con un indocumentado.
“(la ley) pone a miles de Floridanos y residentes de otros estados -tanto ciudadanos como no ciudadanos- en riesgo de ser arrestados, de que les imputen cargos y de ser acusados con una felonía, por transportar una muy vagamente definida categoría de inmigrantes a Florida”, dice la demanda.
Y agrega que las familias no podrán visitarse entre las fronteras del estado y padres que viven cerca de la frontera del estado podrían encontrarse con que no pueden llevar a sus hijos a citas médicas o juegos de fútbol.
También señala que esta sección 10 de la ley impone penas criminales a quien transporte un inmigrante que “entra a los Estados Unidos violando la ley y no ha sido inspeccionado por el gobierno federal desde su entrada ilegal”.
Pero muchas personas que han entrado a EEUU violando leyes de inmigración ya pueden haber solucionado su situación sin que hayan sido “inspeccionados”, dice la demanda.
En otro aparte la demanda señala que la ley debe ser considerada inconstitucional por ir mucho más allá de las leyes de inmigración federales y penalizar una serie de conductas que el Congreso ha elegido no prohibir.
La demanda también responsabiliza a la ley de “ poner a funcionarios estatales en la posición ilegal de tomar determinaciones complejas sobre el estatus legal e historial migratorio de las personas”.
Las organizaciones que interpusieron la demanda son el American Immigration Council, Americans for Inmigrants Justice, Southern Poverty Law Center y la ACLU, además de 9 demandantes que no son nombrados.
La ley de inmigración de Florida es considerada la más dura de EEUU, entre sus apartes penaliza por transportar inmigrantes indocumentados al estado; obliga a los hospitales que aceptan Medicaid que pida el estatus migratorio a los pacientes; obliga a las empresas con más de 25 personas a que verifiquen la elegibilidad de sus empleados a través del sistema E-verify; y cancela las licencias de conducir expedidas a indocumentados en otros estados.
Fue firmada por el gobernador Ron DeSantis y entró en vigor el pasado 1 de julio.
