Tegucigalpa – Teófimo López ha dejado claro que no es un boxeador de una sola noche. Su actuación el pasado sábado en el teatro del Madison Square Garden de Nueva York lo confirmó. El hondureño logró una destacada victoria frente a Josh Taylor, arrebatándole el título mundial WBO del peso superligero por decisión unánime (115-113, 115-113 y 117-111).
A pesar de que Josh Taylor también es un boxeador talentoso y no puede ser considerado como alguien de un solo día, la larga inactividad del escocés (un solo combate en dos años) generó ciertas dudas. Aunque demostró que no ha perdido su calidad, la falta de tiempo en el ring fue un obstáculo ante alguien como Teófimo. En última instancia, ambos púgiles salieron reforzados de esta pelea.
El combate comenzó equilibrado, con Taylor buscando golpear en el cuerpo y Teófimo enfocándose en el contragolpe. Así transcurrieron los primeros cuatro asaltos. Sin embargo, en el quinto round, López conectó un golpe contundente a Taylor, lo que desató su agresividad y activó por completo su juego. Si bien tomó tiempo para adaptarse al ritmo del combate, poco a poco se volvió más preciso y se sintió más cómodo en el ring.
Taylor nunca perdió el enfoque durante el combate, pero la inactividad comenzó a pasarle factura a partir del noveno asalto. Teófimo se encontraba en su mejor momento y lo golpeaba con potencia. Hacia el final del round, el boxeador local logró hacer que el campeón se tambaleara contra las cuerdas.
A pesar de la resiliencia de Taylor, López se mantuvo concentrado en su objetivo. Castigó nuevamente en el décimo y el undécimo round. A falta de tres minutos, el estadounidense tenía la pelea a su favor. Taylor salió en busca del nocaut, pero Teófimo resistió y nuevamente logró hacer que el excampeón perdiera el equilibrio.
El combate se le hizo cuesta arriba al escocés. Con un potente golpe de derecha, López estuvo cerca de noquearlo, pero Taylor supo agarrarse y dejar correr los últimos segundos.
Una vez sonó la campana, ambos boxeadores se abrazaron y celebraron. Teófimo recorrió el cuadrilátero de esquina a esquina, mientras que a Taylor lo alzaron en hombros.
A pesar de la expresión de ambos, estaba claro para ambos el resultado, aunque dos de las tarjetas de puntuación fueron más ajustadas de lo que se pudo apreciar. Su confianza en el resultado quedó reflejada al colocarle el título a Teófimo antes de escuchar las tarjetas de los jueces.
Sin embargo, más allá de la victoria en este combate, López ha demostrado ser un boxeador con un presente destacado y un futuro prometedor. Ha logrado reinar en su segunda división (siendo indiscutido en el peso ligero), y sus próximos pasos serán en grandes combates.
