Tegucigalpa – En las últimas horas, se ha difundido un impactante audio en el que una empleada de la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS) revela información alarmante sobre la tragedia que tuvo lugar en el centro penitenciario, donde perdieron la vida aproximadamente 51 personas.
En el audio, la empleada relata que desde un día antes del suceso, se percataron de la presencia de varias reclusas portando recipientes de gasolina, lo cual generó una profunda preocupación entre el personal.
Asegura que las autoridades penitenciarias ya tenían conocimiento de que se estaba planificando un conflicto violento.
Específicamente, menciona que observaron a varias reclusas pertenecientes a la pandilla Barrio 18 con botellones de combustible.
Además, enfatiza que informaron a las autoridades sobre esta situación, advirtiendo que se pretendía provocar un incendio en el área conocida como «hogar 1». Sin embargo, según expresa con indignación, las autoridades ignoraron por completo esta grave amenaza.
La empleada expresa su decepción y denuncia la falta de acción por parte de las autoridades penitenciarias, incluso cuando tenían conocimiento previo de lo que se avecinaba. En sus propias palabras, lamenta que las autoridades no tomaran las medidas de precaución necesarias para proteger a la población penitenciaria.
La trágica reyerta tuvo lugar en la mañana del martes 20 de junio en la Penitenciaría Nacional Femenina de Támara, situada al norte de la capital hondureña. El saldo fue devastador, con al menos 21 mujeres calcinadas y el resto víctimas de ataques con armas de fuego y armas blancas.
Este escalofriante testimonio revela una serie de fallas y negligencias que han generado consternación en la sociedad. Las autoridades pertinentes deberán investigar a fondo este incidente y tomar las medidas necesarias para garantizar la seguridad de las personas privadas de libertad en el sistema penitenciario.
Además, se espera que se establezcan responsabilidades y se lleve a cabo un proceso de rendición de cuentas para evitar que tragedias como esta se repitan en el futuro.