Foto de archivo del 15 de octubre de 2021, cuando despegó desde Jiuquan, en el norte de China, el cohete Larga Marcha 2F que transportaba la nave Shenzhou-13 con tres astronautas a bordo. EFE/ Álvaro Alfaro
La tripulación de la nave china Shenzhou-14, que se lanzó este domingo, accedió hoy al módulo Tianzhou-4, una nave de aprovisionamiento que Pekín envió al espacio el pasado mayo.
Los astronautas chinos abrieron la compuerta del Tianzhou-4 a las 11.09, hora de Pekín (03.09 GMT), y accedieron a él, informó la Agencia Espacial de Misiones Tripuladas de China.
Los nuevos tripulantes habían llegado anoche al Tianhe, el módulo central de la estación espacial que China está construyendo, a las 20.50 hora local (09.17 GMT), unas diez horas después del lanzamiento de la Shenzhou-14 desde la base de lanzamiento de Jiuquan, en el noroeste de China.
Los tres astronautas, Chen Dong, Liu Yang y Cai Xuzhe, ultimarán durante seis meses la construcción de la estación espacial Tiangong (“Palacio celestial”, en mandarín).
Sus predecesores de la Shenzou-13, Zhai Zhigang, Ye Guangfu y Wang Yaping, completaron hace unas semanas 183 días dentro de la estación, superando la estancia en el espacio de cualquier astronauta chino hasta la fecha.
Durante su permanencia en el espacio, se producirán en la Tierra los lanzamientos de los módulos-laboratorio Mengtian y Wentian, del módulo de carga Tianzhou-5 y de la nave tripulada Shenzhou-15, todos ellos con la estación Tiangong como destino final.
Así, está planeado que los futuros tres tripulantes de la Shenzhou-15 coincidan en la Tiangong con los de la Shenzhou-14 durante aproximadamente una semana, informan medios chinos.
La convivencia de seis astronautas en la estación será un récord en la historia de las misiones tripuladas chinas.
Una vez se acople el laboratorio Wentian a la estación, está previsto que los astronautas usen por primera vez la cabina presurizada de ese módulo para realizar actividades extravehiculares en dos o tres ocasiones.
La estación espacial Tiangong, cuyo nombre significa “Palacio celestial” en mandarín, pesará unas 70 toneladas y se espera que funcione durante unos 15 años orbitando a unos 400 kilómetros de la superficie terrestre.
En 2024, es probable que se convierta en la única estación espacial del mundo si la Estación Espacial Internacional se retira ese año tal y como está previsto. EFE