México. – El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y la vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, hablaron por teléfono el miércoles para discutir cómo abordar las causas detrás de un aumento en la migración con destino a Estados Unidos desde Centroamérica.
Un fuerte aumento en las detenciones en la frontera entre Estados Unidos y México ha planteado uno de los mayores desafíos políticos para la nueva administración del presidente estadounidense Joe Biden.
López Obrador ha desplegado al ejército y la policía para detener el flujo de personas de Centroamérica a Estados Unidos, y durante la llamada, Harris le agradeció su cooperación en asuntos de inmigración, según un comunicado de Estados Unidos.
“Acordaron continuar trabajando juntos para abordar las causas fundamentales de la migración desde los países del Triángulo Norte de El Salvador, Guatemala y Honduras, incluida la pobreza, la violencia y la falta de oportunidades económicas”, dice el comunicado.
Harris, a quien Biden designó el mes pasado para liderar la respuesta de Estados Unidos al desafío de la inmigración, actualizó a López Obrador sobre los “esfuerzos estadounidenses para aumentar la asistencia humanitaria a la región del Triángulo Norte”, agrega el comunicado.
Por su parte, la presidencia mexicana dijo en un comunicado que la convocatoria incluía discusiones para “promover una migración ordenada, segura y regular”, así como protecciones para los menores.
“Existe una voluntad de nuestra parte de unir fuerzas en la lucha contra el tráfico de personas y la protección de los derechos humanos, especialmente de niñas y niños”, dijo López Obrador en Twitter luego de su conversación con Harris.
Las dos partes también acordaron impulsar la cooperación para combatir el tráfico y la trata de personas.
